la opinión invitada

Carta al comisario Hogan

  • La Fundación Savia ha enviado una misiva a la CE alertando del peligro de contagios en cultivos como el cítrico y el olivar.

Carta al comisario Hogan

Carta al comisario Hogan

El presiente de la Fundación Savia, Francisco Casero, ha remitido una carta el comisario de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural de la CE, Phil Hogan, en relación al futuro de la Dehesa. Debido a su interés, la reproducimos tal cual en esta sección de Opinión Invitada. Dice así:

Mr. Hogan:

El sector agroindustrial español atraviesa, desde hace tiempo, una difícil situación como consecuencia de la fuerte presión ejercida por los otros países productores de la cuenca mediterránea, así como por parte de países de otras latitudes, los cuales tienen costes de producción muy inferiores y normativas fitosanitarias mucho más laxas que las europeas.

Se trata de un riesgo que amenaza a un sector que juega un papel social, medioambiental y económico fundamental en regiones especialmente azotadas por el desempleo y la crisis económica. Por otro lado, la garantía de abastecimiento de los consumidores europeos y las posibilidades de exportación hacia otros mercados también podría verse afectados.

Recientemente, se ha generado una alarma social frente a la posible entrada y propagación de enfermedades tan graves como el HLB (Huanglongbing o Citrus greening), la cual constituye hoy en día la mayor amenaza para la citricultura mundial tras ver los efectos devastadores que esta enfermedad ha provocado en los países a los que ha llegado (alta mortalidad de los árboles y/o significativa reducción de los rendimientos del cultivo). Esta enfermedad, causada por la bacteria Candidatus liberibacter, es transmitida por los vectores Diaphorina citri y Trioza erytreae (psílidos). A pesar de que la bacteria no se ha detectado en España, se tiene conocimiento desde relativamente hace poco (otoño del 2014) de la presencia de uno de sus vectores (Trioza erytreae) en el noroeste de la península ibérica (Pérez-Otero et al., 2015).

No menos importante es el caso de las detecciones de Xylella fastidiosa en olivar y otros frutales que se han detectado en Italia, Francia y recientemente en las Islas Baleares, poniendo en riesgo cultivos centenarios de olivos, vid y frutales de la Unión Europea. Esta bacteria se trata de un patógeno de cuarentena dado que ocasiona múltiples enfermedades en diferentes cultivos, cuenta con numerosos vectores y especies de plantas huéspedes y ningún tratamiento control efectivo. En ambos casos frente a Candidatus liberibacter (HLB) y Xylella fastidiosa actualmente no se dispone de material vegetal resistente a dichas bacterias, al igual que ningún tratamiento curativo de las enfermedades que ocasionan. Así, las medidas de lucha se basan en la reducción de la población del vector con tratamientos insecticidas, la eliminación del inóculo mediante el arranque y quema de los árboles infectados, y la propagación de material vegetal sano para la reposición de los árboles arrancados y el establecimiento de nuevas plantaciones.

Asociado a la muerte de los árboles y a la disminución de la producción por la presencia de la enfermedad (pérdida de rentabilidad económica), se registrarían una serie de repercusiones socioeconómicas derivadas de la pérdida de jornales de recolección y manipulación.

Esta situación llevaría al arranque o abandono de gran parte de los cítricos, olivar y frutales cultivados en la cuenca mediterránea, que en muchos casos son parcelas pequeñas o medias en manos de pequeños agricultores.

Como consecuencia de todo lo anteriormente expuesto, SOLICITAMOS a la Comisión Europea, se refuercen los aspectos relacionados con los controles de material vegetal procedentes de países en las que se encuentran dichas enfermedades, así también como con los productos agrícolas no transformados. Solicitamos que se tenga especial celo en la importación de plantas ornamentales pues sus viveros de producción se están convirtiendo en foco de propagación de estas enfermedades e igualmente instamos a que se active un sistema de vigilancia y alerta para el territorio de la Unión Europea.

Solicitamos igualmente que, en tanto en cuanto las medidas de control no tengan plenamente garantizada su eficacia, se tomen medidas extraordinarias para detener cualquier transacción de material vegetal entre las zonas afectadas. Preservar la expansión de la infección provocada por estos patógenos tiene que ser la prioridad. Somos conscientes de lo drástico de esta medida, aun así, consideramos necesario tomarla al igual que se hace con resultados eficaces en el caso de enfermedades que afectan al ganado.

Estimado comisario, la propagación de estas enfermedades por el territorio español y de la Unión Europea puede convertirse en un problema de consecuencias incalculables desde el punto de vista medioambiental y económico dado que afectan a actividades y cultivos de enorme peso como son los cítricos y el olivar, sin descartar nuevas afecciones y enfermedades a otros cultivos y ecosistemas.

Tenemos la obligación de hacer todo lo posible para evitar la propagación de estas enfermedades que, añadidas a todos los problemas ya existentes, pueden acabar con la viabilidad técnica y económica de cientos de miles de hectáreas de producción agrícola, podemos estar ante la filoxera del siglo XXI. Desde la Fundación Savia queremos dejar de manifiesto nuestra voluntad de ayudar y colaborar en todo aquello que consideren adecuado.

En espera de sus noticias, un afectuoso saludo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios