Irlanda retoma la senda del crecimiento tras los peores años de la crisis. La Isla Esmeralda también sufrió la onda expansiva del estallido de la burbuja y dejó de ser ese destino que algunos presentaban como el lugar en el que el recién llegado se hacía con un contrato y y un futuro profesional sólido nada más bajar la escalerilla del avión.

El jerezano Miguel Villagrán aterrizó en Irlanda hace cuatro años. A los pocos meses puso en marcha una empresa enfocada a la inserción laboral de jóvenes inmigrantes españoles. Su experiencia le llevó a detectar "la dificultad de salir de un entorno conocido y la adaptación tanto al nuevo medio físico como al mercado laboral".

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¿Ventajas en Irlanda? Menos burocracia, administración pública enfocada a favorecer la actividad económica y empresarial, pertenencia a la UE y el carácter abierto y acogedor de los irlandeses a una amplia comunidad española. Helpingjob, su primer proyecto empresarial en Irlanda, fue, a través del programa de inserción laboral para jóvenes españoles en Irlanda, una herramienta muy útil.

Ahora, como la financiación de la Dirección General de Migraciones ha concluido -a pesar del éxito del proyecto durante las dos ediciones realizadas-, Villagrán y su equipo no podrán ofrecer este servicio gratuito a españoles que se trasladan a Irlanda buscando un futuro laboral mejor.

"Es necesario un soporte a la hora de dejar tu país. Dejar tu zona de confort por un nuevo entorno desconocido requiere un soporte y una ayuda externa, puesto que todo es más complejo y la realidad no es la que muchos programas de televisión nos han mostrado", explica Villagrán.

Partiendo de esa premisa, el emprendedor jerezano ha fundado un espacio coworking en Dublín, Helpingnetworks, un lugar de trabajo compartido destinado principalmente a empresas y emprendedores españoles que necesitan "algo más asequible que el alquiler de una oficina". Se trata de un "hábitat natural para compartir experiencias profesionales, ilusiones y proyectos". Así, Helpingnetworks es un espacio abierto -también a empresas irlandesas y foráneas- que aúna "la cooperación y el espíritu de colaboración que se da en toda comunidad unida por una situación similar, como dejar tu país y, por otro lado, contar con los contactos y redes que sólo pueden ofrecer los naturales del país de destino".