La Agencia Tributaria y la Guardia Civil intervinieron ayer en Almería 43 kilos de cocaína dentro del buque mercante Besiktas Kazakhstan, de bandera turca, que fue interceptado en el puerto de Carboneras.

A bordo del mercante navegaban 21 tripulantes de nacionalidad turca, que junto a la droga, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Vera para tomar declaración en calidad de investigados.

Esta actuación conjunta se realizó el 5 de julio en las instalaciones portuarias de Carboneras, si bien la operación 'Pamera-Panizo' comenzó hace 20 días, cuando los agentes aduaneros recibieron información procedente del enlace antidrogas de Italia en España, que señalaron la existencia de un buque mercante que transportaba carbón y que se encontraba en las inmediaciones de algún puerto de Andalucía. Además, el navío podía llevar oculta una cantidad indeterminada de sustancias estupefacientes, concretamente cocaína.

Los funcionarios de aduanas llegaron a la conclusión de que se trataba del Besiktas Kazakhstan, que se encontraba fondeando frente al puerto de Carboneras desde el 10 de junio, siendo su origen el puerto de Bolívar (Colombia). Sin tener conocimiento de esto, la Guardia Civil solicitó la ejecución de un fondeo del mercante al ser considerado "sospechoso".

Tras llevar a cabo la inspección en el interior del mercante, los agentes localizaron un espacio oculto en el tanque central de lastre, debajo del servo-motor, que contenía dos bolsas con un total de 39 pastillas, de algo más de 1 kilo de peso, de una sustancia que ha dado positivo al narcotest de cocaína.