Un Gobierno de la Junta "paralizado" por culpa de la "ambición personal" de su presidenta. Ése es el diagnóstico que hacen Podemos e IU de los dos primeros años de legislatura de Susana Díaz. Los jefes regionales de las formaciones de izquierda comparecieron ayer en la Cámara para hacer balance de la primera mitad del mandato de Díaz, marcado, según ambos, por la voluntad de la jefa del Ejecutivo de utilizar el sillón de San Telmo como "trampolín" para llegar al de Ferraz.

"Andalucía necesita una presidenta con la cabeza y el corazón en los problemas de la comunidad y Díaz tiene la cabeza y el corazón en Madrid. No se pueden compatibilizar ambos cargos, vitalmente es imposible atender a la comunidad con más paro y riesgo de pobreza y exclusión", aseveró Teresa Rodríguez, que recordó que antes de adelantar las pasadas elecciones autonómicas de 2015 Díaz ya "hablaba de coger un tren". Ahora "ha cogido posiciones en el andén para ir a Ferraz".

Rodríguez acusa a la presidenta de usar el Ejecutivo como un "trampolín" a Ferraz

"Se ve amortizada en Andalucía e intenta huir de una posible derrota electoral. Detrás de su apariencia de soberbia y avaricia sin límites hay miedo a una derrota electoral", criticó Rodríguez; mientras el líder de IU, Antonio Maíllo abundó en la misma idea. "Estamos ante un Gobierno de parches, sobrepasado por el paro y la pobreza", ha señalado el coordinador, que ha vinculado esta situación y el "deterioro" del gabinete socialista a la "ambición personal" de Díaz y a su aspiración de ser secretaria general del PSOE.

Preguntado por si prefiere que Díaz gane las primarias socialistas, tal y como expresó el martes Juan Marín, el líder de Ciudadanos, Maíllo respondió en clave regional: "No sé si lo que propone es que lo mejor que puede pasar es que se vaya de Andalucía. Puede ser. Más que una vuelta por España, lo que tiene que hacer la presidenta es darse una vuelta por la comunidad".