José Luis Sanz Ruiz (Sevilla, 1968) es el secretario general del Partido Popular de Andalucía desde el pasado 15 de julio cuando Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla, accedió a la presidencia de los populares en el congreso regional celebrado en Granada. Desgrana los objetivos y filosofía de un nuevo proyecto político, más municipalista, el que ha iniciado el PP en torno a Juan Ignacio Zoido.

-¿Cuál es su valoración sobre la gestión que realiza el bipartito en la Junta?

-En los ocho meses que lleva el bipartito los andaluces hemos podido percibir que en el peor momento económico seguramente de nuestra historia tenemos al peor gobierno posible. Creo que a nivel nacional se percibe que hemos vuelto a coger el tren de la recuperación económica y a finales del año que viene empezaremos a ver la luz, pero desgraciadamente los andaluces tenemos el temor de que nos vamos a quedar atrás por culpa del bipartito de perdedores que hoy gobierna Andalucía.

-¿Y qué le han parecido los presupuestos del próximo año, una vez más sin provincializar?

-Por un lado, me parece una auténtica falta de respeto y un engaño para el conjunto de los andaluces que almerienses, malagueños o cordobeses no sepan lo que invierte la Junta en sus ciudades y provincias. Y, por otro lado, considero que han presentado unos presupuestos políticos que van mucho más encaminados a mantener las estructuras políticas de PSOE e IU que a buscar el interés y el bien de los andaluces.

-Pero recortes están aplicando todas las administraciones... ¿cuáles son los que propone el PP?

-Nosotros no vamos a admitir ningún recorte en sanidad, en educación, en servicios sociales si antes no se recorta en mucho gasto superfluo que se puede suprimir, hay mucho cargo político que se puede recortar, hay mucho coche oficial del que se puede prescindir... En el sector público empresarial andaluz no tiene ningún sentido que la Junta pretenda mantener hoy día las 124 empresas públicas.

-La comisión de los ERE se cierra en falso, ¿era lo que esperaban?

-Desgraciadamente las conclusiones que han salido de la comisión de investigación las pactó el bipartito el mismo día que se repartieron los sillones y los coches oficiales. Desde el principio hemos dicho que nos parecía un paripé y el tiempo nos ha dado la razón. Lo fue en su creación, durante sus trabajos y desarrollo y también lo es el dictamen con las conclusiones de la investigación. Nos parece impresentable el papel que ha estado jugando Izquierda Unida en esta comisión, en todo este tiempo desde su creación el pasado mes de agosto, que hayan renunciado a aquellos principios, valores e ideología de la que tanto nos vienen hablando por cuatro coches oficiales más y por cinco o seis cargos más en la administración andaluza.

-¿Pueden casos como el de los ERE hacer peligrar el pacto en la Junta?

-Creo que no, cuando uno renuncia a su proyecto político por cuatro cargos como ha hecho IU es porque está dispuesta a tragárselo todo en esta legislatura.

-¿Ha superado ya el PP esa etapa de transición abierta con el relevo de Arenas? ¿Están trabajando ya para que Zoido presida la Junta?

-El PP ha hecho una transición ejemplar porque en cuatro o cinco meses ha cerrado una etapa liderada por alguien que ha hecho historia en el partido en Andalucía, como Javier Arenas, gracias al que hoy somos la primera fuerza política de nuestra tierra. Se ha producido una renovación ejemplar con el congreso regional y los provinciales. El PSOE, sin embargo, lleva más de dos años, desde que Chaves pegó la espantá a Madrid, sin recuperarse, envueltos en peleas y luchas internas por toda Andalucía.

-¿Por qué cree que transcurridos tan pocos meses desde que Zoido asumió la dirección regional se han escuchado ya algunas voces críticas cuestionando su liderazgo?

-Todo el partido en Andalucía tenía muy claro quién debía liderar el proyecto político del PP desde el mismo día en el que Javier Arenas anunció que no iba a seguir y puedo garantizar que está unido como nunca en torno a la figura de Zoido.

-Parece que cuando se habla de sucesión hay muchos a los que le apetecería. Por ejemplo, tenemos a la delegada del Gobierno en Andalucía (Carmen Crespo)...

-Es que si usted se lo pregunta a los ocho millones y medio de andaluces si les gustaría ser candidatos del PP de Andalucía los ocho le contestarían lo mismo. Pero ese debate no está abierto ahora mismo en el PP. Ese debate no toca, estamos en una etapa de unión en torno a la figura de quien debe liderar el partido que es Juan Ignacio Zoido. Quién sí tiene un problema de candidatos en este momento en Andalucía es el PSOE. Si pensamos en candidatos posibles del PP se nos ocurren cinco o seis personas, si pensamos en los socialistas solo se nos vienen a la cabeza dos con suerte, porque intentarán cambiar al señor Griñán que no ha ganado nunca unas elecciones.

-Mirando atrás queda claro que Griñán acertó posponiendo las elecciones, ¿cuál sería entonces el error del PP de Javier Arenas?

-Enfrentarse a Rubalcaba por posponer las autonómicas ha sido el único acierto que ha tenido desde que heredó el poder de Chaves, hay que reconocérselo. Ahora después de las elecciones es fácil decir en qué nos equivocamos, creo que pudo ser por una conjunción de factores. Por un lado la coincidencia de tres procesos electorales casi en el mismo año produjo efecto fatiga. También las elecciones anteriores del 20 de noviembre fueron importantísima y parte del electorado andaluz tenía la sensación de que el cambio ya se había producido. Y también las medidas adoptadas por el Gobierno de la Nación nos perjudicaron, por ejemplo la subida del IRPF o la reforma laboral.

-¿Qué aportan Zoido y Sanz al PP andaluz que no tuviera antes?

-Creo que Juan Ignacio es una persona mucho más de equipos, cree no tanto en las personas con nombres y apellidos, sino en los grupos de trabajo y puede ser muy importante la aportación que podemos hacer desde la política municipal. Es muy sacrificada, pero también muy gratificante y debería ser una experiencia obligatoria por la que pasaran los políticos antes de llegar a cargos importantes en el partido.

-¿Le gustaría tener ocho presidentes provinciales como Gabriel Amat en Andalucía?

-Nos gustaría tener ocho Gabriel Amat y ocho Luis Rogelio Rodríguez-Comendador (alcalde de Almería). Si tuviéramos ocho tándem como el que tenemos en Almería contaríamos con una mayoría absoluta muy holgada.

-Algunos cargos del PP, como el alcalde de Málaga, hablan de una vuelta al centralismo sevillano...

-Lo del centralismo me parece una auténtica catetada, soy totalmente contrario a los localismos. A mí, como secretario general del partido, se me cuestionaba que fuera de Sevilla. Respeto, por ejemplo, lo que Paco de la Torre piensa y lo he hablado con él, pero discrepo. Tiene un discurso como alcalde de Málaga, pero creo que a los andaluces nos habría ido mucho mejor si no fuéramos tan catetos e insisto: Zoido no podrá estar tanto tiempo en la carretera como Arenas y lo va a suplir con buenos equipos.