Hasta la salida de Rajoy todo apuntaba a que el alcalde saldría de una alianza entre PP, Cs y la plataforma de Girón.

Los de las hormigoneras están de fiesta y aseguran que no repetirán los errores que nos condujeron a la crisis.

La ciudad inteligente sufre parálisis cerebral crónica, no posee influencia alguna y es la cola del ratón andaluz.

El nacionalismo futbolístico blanco está despedazando a Rubiales por haber cesado a Lopetegui.

Candel prescribe un tratamiento imposible: la dimisión de todo un aparato político que sólo caerá en las urnas.

Es un Gobierno rutilante: libre de cintura para abajo, progresista en lo social y fieramente neoliberal en lo económico.

Pedro, el de los pies ligeros, habrá de gobernar en solitario y decidir después si toma la senda de Portugal o de Italia.

Emucesa fue un saco sin fondo mientras tuvo carácter público y pagaba más de 300.000 euros a las 'fantasmas' del PP.

¿Por qué va a ceder a la ambición de Rivera, que quedó ¡cuarto! aunque ahora venza en las encuestas?.

Todo lo que haga y diga Ciudadanos estará bien, incluso si supone la continuidad del lodazal político nacional.