El ex alcalde de Marbella Julián Muñoz fue ayer el primero en tomar la palabra al inicio del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial por el caso Fergocon y consiguió que el Tribunal le evite acudir a todas las sesiones por su estado de salud. Con una más que evidente pérdida peso, se acercó con dificultades al micrófono y se dirigió al presidente del Tribunal para decirle: "No voy a poder aguantar todo el juicio". Iba vestido con pantalón de chándal, camiseta y zapatillas deportivas, todo de color negro, y durante la sesión acompañó sus movimientos con un pañuelo de papel, con el que constantemente se frotaba la boca.

Muñoz hizo referencia al trasiego de ir y venir desde la cárcel de Alhaurín de la Torre, precisando que algunos días lo tienen que llevar incluso al hospital. "Yo si usted lo considera vengo, pero no voy a aguantarlo", le precisó al presidente de la Sala. La defensa de Muñoz, ejercida por el abogado Javier Saavedra, aportó documentación sobre el estado actual del ex alcalde marbellí y solicitó que "debido al grave deterioro de su salud" se le permitiera acudir únicamente a las sesiones imprescindibles.

Después de que el fiscal aceptara la petición por el estado de salud de Muñoz, la Sala le eximió de acudir a todas las vistas de un juicio que está previsto que se alargue hasta finales de octubre. Aunque no está fechado en jornadas consecutivas, Muñoz le indicó al magistrado que "los días de descanso en la cárcel no crea que son de descanso". La Audiencia Provincial le acaba de revocar el tercer grado penitenciario que hace un mes le concedió el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria.