El Granada B no pudo prolongar su buen momento de forma tras la goleada infligida la semana pasada al UCAM Murcia en la Condomina. Los de Aguado cayeron ayer derrotados en Los Cármenes ante La Hoya Lorca por 0-2 en un partido en el que el resultado casi fue lo de menos. El filial, que llegaba al choque con bajas y recuperaba a Sulayman tras dos meses de inactividad, acabó el encuentro con ocho futbolistas entre lesiones y expulsiones. Demasiados contratiempos para hacer frente a un rival con poca mordiente, aunque con bastante acierto en sus llegadas.

El filial, que empezó tedioso como en casi todos sus duelos en casa, cayó en la trampa de un cuadro lorquino que basó sus esperanzas en el repliegue intensivo y la salida a la contra. Poco a poco, los de José Miguel Campos fueron tejiendo una tela de araña que atrapó el fútbol vistoso de los rojiblancos, ayer perdidos en la transición y carentes de recursos para buscar la alternativa por los carriles. Y encima el colegiado tampoco es que ayudase. Si bien no incidió directamente en el resultado final, el balear González González sí que estuvo desafortunado en acciones significativas. Cargó de tarjetas a ambos equipos y castigó severamente a un 'B' mermado por completo.

Aguado planteó un dibujo caracterizado por las permutas en el centro del campo. Con Uche enganchado atrás, por momentos casi de líbero, Boateng y Sergio Martín se intercambiaron los roles en el centro del campo. El ghanés incluso llegó a ocupar posiciones de mediapunta y hasta de segundo delantero, mientras que el segundo buscó sin éxito aprovechar su juego distributivo para sacar el esférico jugado.

Todo se desmoronó con el paso de los minutos. El filial, que arrancó el encuentro a caballo entre el 4-1-4-1 y el 4-4-2 terminó con un 4-2-1 con Sergio Martín como lateral derecho y Medina cojeando en el flanco zurdo. Un plato de difícil digestión en un partido que, por otra parte, fue aburrido hasta decir basta antes de que llegaran los problemas.

Todo se decidió en los segundos cuarenta y cinco minutos, cuando La Hoya aprovechó el desconcierto en bloque de toda la defensa para hincarle el diente a los de Aguado. De hecho, los avisos del 'B' se limitaron a tres acercamientos al área a medio camino entre la ocasión y el "uy".

El primero de ellos, además, pudo marcar un antes y un después en el transcurso del envite. A los nueve minutos, Success recibió y fue derribado por Antonio López. El delantero nigeriano se quedaba sólo delante de Raúl Moreno, pero el trencilla se agarró a la holgura del reglamento para interpretar que ariete y defensa iban pegados en la carrera, y que el primero estaba combado y no en situación manifiesta de perforar el arco rival. Amarilla para el jugador del brócoli mecánico y primer síntoma de que algo no iba a ir bien.

Tres minutos más tarde, otro punto de inflexión. En una jugada embarullada, Diego -que había subido a rematar un lanzamiento lateral- se encontró el esférico suelto delante suya, pero su remate no encontró portería. Consciente de la pujanza de los rojiblancos, José Miguel Campos arriesgó aún menos hasta el descanso. Un remate errado de Boateng en el 34' fue todo lo que dio de sí el cuadro granadinista.

A partir de ahí todo se puso en contra del 'B'. Ya antes del descanso, Success cayó lesionado y, tras varios intentos por regresar al terreno de juego, tuvo que terminar siendo sustituido por Wilson Cuero.

En la segunda parte más de los mismo. A los cinco minutos, una nueva vicisitud en forma de lesión dio al traste con el plan de Joseba. Luizinho dejó su lugar en el campo Denilson, que una vez más anduvo perdido por el verde del Nuevo Los Cármenes. Al técnico rojiblanco sólo le quedaba un cambio. Y lo agotó en el 69', cuando decidió darle descanso a Uche y minutos a Sulayman, que volvía a una convocatoria dos meses después. Mala decisión.

El primero llegó en el 72', en una jugada aislada por la derecha que Bernal remató a gol tras un choque entre Carmona y Dimitrievski que también dejó en el suelo a un jugador visitante. Pudo haber falta de este último sobre el macedonio al impedir que se levantara. A Morante se unió Medina y a este último Sulayman, que terminó tocado y regalando el segundo gol con tras intentar regatear en su zona de tres cuartos a dos rivales. Bernal robó y Joselu definió magistralmente en el 76'. En apenas cuatro minutos todo al traste.

Sulayman y Morante completaron la faena con sendas expulsiones. El primero tras dos faltas innecesarias y el segundo después de una protesta en el 75' y una amarilla rigurosa en el 82'. El 'B' depende ahora de la Balona.