El Granada CF no sabe lo que es ganar el partido de después del parón inicial de Liga que se produce cada temporada para que los combinados nacionales cumplan con sus compromisos. Al menos, en las últimas cuatro campañas, desde que el club rojiblanco vivió su retorno a Primera División tras más de tres décadas alejado de los focos de la élite. Y es que, que después de las dos o tres primeras jornadas ligueras se produzca un 'descanso' en la competición, se ha convertido en los últimos años en algo tradicional. Como también que a los granadinistas se les atragante cada una de las citas oficiales que le siguen.

Esta es el quinto curso que los de franjas horizontales deberán hacer frente a un envite de ese estilo desde su regreso a Primera División. El balance global de las cuatro ocasiones postreras, no obstante, no es nada halagüeño para sus intereses. Dos derrotas y dos empates. Y, únicamente, un tanto a favor, por hasta seis en contra. El mejor recuerdo para los hinchas 'filipinos' data de la temporada 2012-2013. Y lo es a medias por el resultado, no por sensaciones.

El domingo 16 de septiembre de 2012, los granadinos lograban empatar un encuentro que se les había puesto muy difícil antes del asueto frente al RC Deportivo de la Coruña, después de un fallo en un pase de Mainz al cancerbero. A menos de diez minutos del final, Floro Flores hacía el 1-1 definitivo, en uno de los escasos buenos momentos que dejó con la rojiblanca el italiano. Más allá del resultado, el choque es recordado por ser el que sirvió como carta de presentación a Brahimi, que revolucionó un mal partido de sus compañeros tras salir desde el banco. Fue la cuarta jornada.

Las otras tablas después del primer parón son las que cosecharon el curso pasado ante el Villarreal CF -precisamente, el rival al que se batirán dentro de nueve días-. Con Caparrós como piloto de la nave, los granadinistas no pasaron del 'cerocerismo' en la tercera fecha del campeonato nacional. Pero si negativos son esos dos antecedentes, más aún el resto. Especialmente dura fue la goleada cosechada el 12 de septiembre de 2011. Un Granada CF casi novato en la categoría -fue la campaña del retorno- visitaba La Rosaleda. Esperaba un Málaga CF que vivía días dorados, con importantes inversiones en futbolistas como Toulalan o Cazorla. La ilusión visitante no fue suficiente y, con Fabri en el banquillo, los rojiblancos cayeron por 4-0 en un choque que cerró aquella jornada un lunes.

Otro verdugo de los granadinistas fue el RCD Espanyol. El conjunto 'perico', eso sí, contó con la inestimable ayuda del trencilla gallego Iglesias Villanueva. El colegiado señaló cesión en un balón que pugnaba Fran Rico en la frontal de su área y que acabó en las manos del meta Roberto. Lanzarote lanzó y convirtió el 0-1 que le valió tres puntos a la escuadra catalana en una calurosa mañana de domingo de la 2013-2014.

Que las fechas FIFA -estipuladas para encuentros internacionales de las distintas selecciones- provoquen que la Liga BBVA se detenga temporalmente no sienta bien al cuadro de Los Cármenes. Mas ese no parece ser el único salto de calendario que se les atraganta ya que el Granada CF tampoco ha ganado su primer partido de cada año después del descanso de Navidad. Que esta campaña se haya eliminado la tregua de los turrones puede acabar definitivamente con una mala racha que se alarga en el tiempo más de lo que quisieran la hinchada y los dirigentes de la entidad antes sita en Recogidas 35. El Villarreal CF no es, a priori, el mejor contrincante para dar por concluida la aciaga marcha por el desierto. Si los granadinistas son capaces de mostrar una imagen cercana a la de la primera parte ante el Getafe CF, tendrán opciones. De lo contrario, un muy reforzado conjunto castellonense puede alargar la pesadilla.