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Nadal supera a Lorenzi y al calor

  • El balear avanza a semifinales tras resentirse de sus problemas estomacales Thiem, siguiente rival

Rafael Nadal se sobrepuso a una jornada de calor agobiante y a sus molestias estomacales y avanzó a las semifinales del Abierto de Buenos Aires con una trabajada victoria sobre el italiano Paolo Lorenzi.

Defensor del título en Argentina, Nadal derrotó al número 52 del escalafón por 7-6 (7-3) y 6-2 en una hora y 51 minutos de un encuentro que le planteó muchas más dificultades de lo previsto, especialmente en el primer set.

De este modo, Nadal busca hoy un lugar en la final ante el austríaco Dominic Thiem, una de las mayores promesas del circuito, que en la primera ronda derrotó a Dusan Lajovic por 6-4 y 6-2.

"Las condiciones son extremas y me está costando un poquito, quiero agradecer a la gente que hasta con este sol estuvo aquí para animar", señaló un Nadal visiblemente agotado tras el choque.

Apenas diecisiete horas después de su estreno ante Juan Mónaco, Nadal debió volver en una jornada de calor agobiante en Buenos Aires, con temperaturas en torno a los 35 centígrados.

Nadal, además, afrontaba su segundo compromiso en Buenos Aires con algunas molestias estomacales, según reveló el jueves por la noche tras su encuentro ante Mónaco. Ayer debió ser atendido nuevamente por ese motivo en el final del primer set, aunque pudo continuar jugando con aparente normalidad.

"El cambio de temperatura ha afectado el estómago, pero no es nada para preocuparse", explicó después del encuentro. Al igual que en su estreno, el manacorí combinó destellos de su talento y potencia -especialmente cuando consiguió castigar con su drive- con errores impropios de su alta categoría.

Nadal salió con todo en el primer set, dispuesto acaso a gastar la menor cantidad de energía posible, y se colocó rápidamente 4-1. Sin embargo, una sucesión inexplicable de errores y algunos aciertos de un Lorenzi que jugó por encima de su nivel permitieron al italiano igualar 4-4.

Llegaron así al tie-break, donde Nadal impuso su jerarquía. En la segunda manga, el tenista balear siguió cometiendo errores, pero esta vez no soltó a su presa y logró cerrar el partido con mayor holgura en el segundo capítulo.

Nadal dio así un paso en Buenos Aires, aunque dejó la sensación de que deberá subir un escalón si quiere defender el título.

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