Mª CARMEN CANTERO. DIRECTORA GENERAL DE COMERCIO (Consejería de Turismo y Comercio)

"Continuaremos con las acciones impulsoras del comercio andaluz"

  • La Consejería de Turismo y Comercio de la Junta de Andalucía hace balance, a mitad de legislatura, de las políticas de reactivación para potenciar el sector comercial regional.

MARÍA del Carmen Cantero, directora general de Comercio de la Consejería de Turismo y Comercio -tutelada por Izquierda Unida (IU)- hace balance del trabajo realizado en el ecuador de una legislatura que, en cuanto al sector comercial se refiere, desde el año 2012, ha dado mucho de sí. Cuando IU llegó a esta Consejería se encontró con una normativa estatal que desprotegía y ponía en desigualdad de condiciones al autónomo del comercio andaluz.

Con posterioridad, también se procedió a la modificación de la Ley del Comercio Ambulante, una reivindicación que desde el año 2010 los comerciantes ambulantes venían reclamando. En materia de artesanía, la Dirección General se encontró un departamento que tenía muchas potencialidades y que, con posterioridad, cristalizó en acciones muy aplaudidas por los artesanos y artesanas.

En cuanto al comercio, desde la Consejería, se ha organizado el I Congreso de Centros Comerciales Abiertos de Andalucía para, en febrero, celebrar también el I Congreso de Artesanía. Todo ello, con el fin de crear distintos foros donde la Administración pública pudiera exponer sus intenciones y, al mismo tiempo, poder recabar el respaldo de los agentes reorientando, de ser necesario, los objetivos. Dos sectores, el comercio y la artesanía, para los que se han reactivado subvenciones e inyección de liquidez.

En definitiva, la Dirección General de Comercio ha tenido, en todo momento, la máxima de proteger a través de las diferentes medidas adoptadas el comercio local como lucha contra las medidas del Gobierno central, en cuanto a la liberalización de los horarios de los grandes centros comerciales.

Así pues, hay que destacar medidas reactivadoras para el comercio y la artesanía, impulso y recuperación de las subvenciones y ayudas e interlocución permanente con el sector como tres de los pilares fundamentales para la directora general de Comercio quien, a pesar de ser una de las políticas más jóvenes del co-gobierno andaluz -tiene 31 años-, con su Licenciatura en Administración y Dirección de Empresas y más de un lustro de experiencia en el sector privado, ha hecho gala de una lucha vehemente por el tejido comercial andaluz. El consenso buscado y encontrado en todo momento, ha sido producto de muchos kilómetros en carretera habiendo dado, señala, "alrededor de siete vueltas a Andalucía en estos dos años de legislatura".

-El V Plan Integral de Fomento del Comercio Interior de Andalucía, elemento vertebrador de la hoja de ruta en materia comercial, ha sido recientemente aprobado con gran aceptación por parte del sector. ¿Qué opinión le merece?

-Tras la ardua elaboración y  modificación de la Ley del Comercio Interior de Andalucía, entre todos y todas consensuamos que el resultado debía tener nombre propio: Plan de Reactivación del Comercio Andaluz. Muchas de las acciones que venimos desarrollando se contemplan en este acuerdo, donde se da prioridad a la defensa y protección del modelo comercial andaluz, que implica unas connotaciones propias, forma parte del desarrollo de las ciudades de una forma sostenible y fomenta el mantenimiento y crecimiento del empleo de calidad. Hay que recordar que la aportación al PIB andaluz del sector comercial ronda el 12%, lo que implica que genera empleo para más de medio millón de trabajadores y trabajadoras.

-Recientemente el Gobierno central ha aprobado una nueva normativa que vuelve a liberalizar los horarios comerciales y amplía las zonas de gran afluencia turística. Una medida contraria a lo que su Consejería defiende, ¿no es así?

-Efectivamente. Quiero recordar que la bienvenida que el Gobierno central nos dio en nuestra entrada al co-gobierno andaluz, fue la imposición y vulneración del Estatuto de Autonomía de Andalucía, imponiendo unos criterios que venían a incrementar los horarios de apertura de los establecimientos comerciales. Medidas que ni habían sido reclamadas por el sector ni demandadas por la propia Comunidad Autónoma. Cuando el propio sector comercial no lo ha demandado, ¿para qué se establece? Para beneficiar a una parte minoritaria y responder a unos intereses particulares.

Nosotros estamos para que los formatos comerciales convivan en igualdad de condiciones y denunciamos que exista trato desigual por parte del Gobierno central con respecto al comercio local. Nuestro argumento es que, si hay un sector mayoritario como es el pequeño comercio que está manteniendo los empleos -aun habiendo tenido más pérdidas que las grandes superficies-, debemos orientar nuestra política comercial a fomentar y poner en valor ese esfuerzo que han realizado las pymes. ¿Qué sería de Sevilla, por ejemplo, sin la calle San Jacinto o la calle Feria? ¿Y qué sería de Granada sin la calle Mesones? Las vías comerciales son las arterias de las ciudades que vienen a representar la configuración de los pueblos y barrios, entendiendo el comercio como algo más que una actividad económica.

-En esa línea hay que poner en valor las Oficinas de Integración comercial, ¿no?

-Sí. Se trata de una conceptualización algo complicada a la hora de transmitir, pero muy sencilla en su objetivo. La territorialización aprovecha las sinergias y la economía de escala que se pueda generar entre dos sectores tan importantes para nuestro desarrollo económico andaluz como es el productivo y el comercial. Desde la competencia de comercio, nuestro objetivo está en incrementar la cuota de mercado del comercio local. Y, para ello, principalmente hay que poner en desarrollo elementos que fomenten precios más atractivos para el consumidor eliminando los costes superfluos, no los laborales.

-De ahí se deriva la alianza para comercializar la producción agroalimentaria con las pymes.

-En Andalucía existe mucho potencial para llevar a cabo un desarrollo local que influya en el nuevo modelo productivo. En ese contexto, faltaba una parte fundamental del desarrollo que es la comercialización. Y, el armazón o escaparate para comercializar esos productos andaluces agrícolas, son los pequeños y medianos establecimientos.

Nosotros ponemos en marcha esta simbiosis del sector productivo y comercial -sin antecedentes previos-, con la intención no de promocionar los productos andaluces de forma puntual, sino para que se establezca de forma permanente una comercialización de nuestro productos en los establecimientos locales. Ese es el objetivo. Y, en torno a esa estrategia, ganamos todos. Ganamos como Comunidad Autónoma a la hora de desarrollar dos sectores prioritarios que generan un valor añadido a nuestra economía. Pero también ganamos como ciudadanos y como ciudad, fomentando el empleo y el propio territorio… Son muchos los beneficios que se pueden obtener aprovechando esa economía de escala de dos sectores tan potentes como el comercial y el productivo. Quisiera destacar, además, que esta iniciativa se enmarca dentro de nuestra competencia. En absoluto invadimos las de Agricultura sino, que a través de los establecimientos que se encuentran bajo la responsabilidad del centro directivo de comercio, se promociona los productos andaluces.

-La artesanía ha recibido también un gran impulso desde que  llegaron al Gobierno autonómico.

-Esa afirmación corresponde a los artesanos y artesanas. Pero, no obstante, sí puedo destacar que la artesanía tenía mucho potencial cuando Izquierda Unida llegó a la Dirección General de Comercio. Uno de ellos era aprovechar las sinergias que otros sectores le pudieran aportar a esa difusión y promoción de la artesanía andaluza, como podía ser el turismo y el comercio. A partir de ese origen, impulsamos las Rutas de Interés Artesanal -vinculadas a las Zonas de Interés Artesanal-, con el fin de establecer una guía para, cuando el visitante o el turista llegue a los pueblos, sepa dónde se encuentra el gremio artesanal del municipio. Para ello, la difusión a través de las nuevas tecnologías ha sido fundamental. A través de la página web de Turismo Andaluz, que tiene aproximadamente cuatro millones de visitas al año, encontramos un mapa de Andalucía interactivo donde, en municipios de las ocho provincias andaluzas que tienen talleres, éstos se identifican facilitando el contacto; todo ello con el fin de incrementar las ventas del sector artesanal.

-¿En qué punto está el Plan de Comercio Ambulante?

-El Comercio Ambulante en Andalucía da empleo a más de 40.000 familias que, en el año 2010, vieron peligrar su estabilidad laboral. En ese contexto, establecimos una modificación de la ley para darle estabilidad y calidad a este segmento. Ahora hay que dar el siguiente paso que es establecer la hoja de ruta, las líneas estratégicas y los programas que, desde la Administración pública, se pueden desarrollar para promocionar este comercio.

Actualmente estamos en proceso de elaboración del borrador. Como todos los planes que desarrollamos, se hace con los medios propios de la Consejería, no se subcontratan servicios externos. Tenemos unos funcionarios de mucha valía profesional que son expertos en las diferentes materias. Así pues, todos los planes de la Consejería se desarrollan en la misma, evitando gastos superfluos que pueden ser revertidos en otras cuestiones que el comercio necesita. Preveemos que, para el segundo semestre del 2014, verá la luz el que será el I Plan del Comercio Ambulante de Andalucía y de España.

-¿Qué acciones afrontará la Dirección General de Comercio en lo que queda de legislatura?

-Lo que nos plantemos, fundamentalmente, es seguir con nuestra estrategia comercial de defensa y protección del modelo comercial andaluz; asimismo, también continuaremos desarrollando la territorialización de los canales de distribución cuya meta es el incremento de la cuota de venta del pequeño y mediano comerciante y que los productos andaluces tengan salida en nuestro territorio. En el ámbito de la artesanía, vamos a establecer de manera permanente las líneas de subvenciones y establecimiento de las distintas líneas de promoción y difusión.

Hay que tener en cuenta que siempre hemos escuchado la importancia del aprovechamiento de las sinergias entre la artesanía y el turismo, pero ahora pretendemos que la rentabilidad vaya directamente para el artesano. En ese sentido, desde el año 2012, los artesanos y artesanas se han incorporado a la Feria Internacional del Turismo con sus stands y exposiciones consiguiendo una promoción internacional realmente importante. Promoción que intentamos que sea a todos los niveles. Así, por ejemplo, en los recientes Premios Andalucía del Comercio Interior, el primer reconocimiento del sector en Andalucía, decidimos que los galardones entregados a los comerciantes fueran trabajos de los artesanos y artesanas. Fue un momento muy emotivo donde se sintieron muy reivindicados.

Por otro lado, para el segundo semestre de 2014 está prevista la aprobación de la Ley de Cámaras de Andalucía, basada en tres principios básicos: democratización, pluralidad y transparencia de las Cámaras de Comercio.

Para concluir, partiendo de la base que hemos conseguido una interlocución permanente con el sector, que es fundamental para cualquier medida, sí nos hacemos la autocrítica de no haber llegado de manera más profunda a ese autónomo y autónoma que está detrás del mostrador. Queremos en suma, con pedagogía exquisita, trasladar al sector nuestra intención de aumentar los instrumentos que puedan mejorar el tejido comercial y dejar constancia de que la Consejería de Turismo y Comercio estará en primera línea.

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