Ebro Foods propondrá en su junta general de accionistas, que celebrará el próximo 1 de junio, el pago de un dividendo anual en metálico de 0,54 euros por título con cargo al beneficio de 2015, según consta en el orden del día remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

En concreto, la compañía, que cerró 2015 con un beneficio de 144,8 millones de euros, liquidará dicha retribución a lo largo de este año en tres pagos de 0,18 euros por acción cada uno de ellos los días 1 de abril, ya satisfecho, 29 de junio y 3 de octubre. Asimismo, la junta dará el visto bueno a la remuneración fija de los consejeros y aprobará mantener fijado en trece el número de miembros del consejo de administración.

Los accionistas darán luz verde, con toda probabilidad, a una dispensa a determinados miembros del consejo de administración de la obligación de no desarrollar actividades por cuenta propia o ajena que pudieran considerarse que entrañan competencia efectiva con la firma. Se tratab del presidente de la compañía, Antonio Hernández Callejas, y los consejeros Rudolf-August Oetker, Félix Hernández Callejas, en su condición de persona física representante de Instituto Hispánico del Arroz, y a Blanca Hernández Rodríguez (Hispafoods Invest).

La compañía arrancó 2016 con buen pie. El grupo presidido por Antonio Hernández Callejas anunció esta semana un beneficio de 43,3 millones de euros en el primer trimestre de 2016, un 43% más que en el mismo periodo de 2016. Este resultado se debió a la evolución positiva de su negocio y a las plusvalías generadas por la venta del negocio arrocero de Puerto Rico, que no era estratégico para el grupo. Las ventas de Ebro Foods crecieron un 2,7% en el primer trimestre, hasta los 613 millones de euros, por el buen comportamiento de la división arrocera y la de la pasta, así como por la aportación de nuevos negocios como Roland Monterrat y RiceSelect.