La frase recurrente de muchos padres de que los niños vienen sin 'libro de instrucciones' ya se puede dejar de utilizar. A las numerosas publicaciones sobre pediatría y cuidado y crianza de los niños se acaba de unir un manual básico que hará la vida más fácil a padres y familias cuando llega un hijo a casa. Se trata de Pediatría con sentido común para padres y madres con sentido común de los doctores Eduard Estivill y Gonzalo Pin editado por Plaza Janés, que hoy se presenta en Granada en el encuentro de la Sociedad Española de Neurofisiología Clínica.

-Los padres de medio mundo le conocen por su libro 'Duérmete niño'. ¿Cómo se duerme un niño, como puede, cómo le enseñan o cómo aprende?

-Los últimos estudios científicos demuestran que el sueño de los niños es un hábito que se puede enseñar. Antes se pensaba que el niño se dormía solo pero al ser un hábito es algo que se puede aprender porque no se sabe, igual que comer una sopa con cuchara. Aplicar unas rutinas, poner unos horarios, dejar al niño en su cama y entrar de vez en cuando son cosas que hay que hacer hasta que el niño lo aprende, y como son muy listos lo hacen pronto.

-De hecho, aprender a dormir desde niños beneficiará en la etapa adulta.

-El sueño es muy importante y está demostrado que los niños que aprenden a dormirse bien rinden más, tienen menos problemas de conducta y son más felices. Y así será para el resto de la vida.

-Pero sabe que hay quien apuesta más por complacer al niño con besos, abrazos o llevándoselo a dormir a la cama de los padres que hacerles 'sufrir' durante el tiempo de aprendizaje de dormirse solos.

-No tiene nada que ver el método de aprendizaje con los besos y las caricias, de hecho el niño recibe el mismo afecto pero educando en unos hábitos.

-Ahora se lanza un nuevo libro pero que va dirigido a toda la familia y que explica cómo educar y cuidar desde el nacimiento hasta la edad adulta.

-Es un libro de 500 páginas para que todos los papás sepan lo que deben hacer. Tiene una primera parte en la que se habla del desarrollo del niño, una segunda parte en la que nos centramos en la educación, cómo enseñarles valores y prepararles para la edad adulta partiendo de que también hay que educar en la frustración y en que sepan que el éxito es puntual, que no se puede conseguir todo. Hay padres que consienten a los niños demasiado y eso no les conviene. El fracaso les prepara para la vida. Y una tercera parte, la más novedosa, que aporta una lista de enfermedades más comunes entre los 0 y los 18 años, cómo reconocerlas y qué hacer.

-El libro se dirige también a abuelos, cuidadores, profesores, todos los que tienen que ver en la educación de los niños. Supongo que tendrán que llevar una línea similar para no caer en contradicciones.

-El niño recibe información y educación de los padres, pero hoy en día tienen poco tiempo y los abuelos y los canguros se encargan de cuidarlos mucho tiempo. En ese caso el niño tiene que recibir la misma educación porque si no se vuelve un tirano y hay más casos ya de alteraciones de conducta en personas que de pequeñas eran unos consentidos.

-Pero no es nada fácil educar a un hijo.

-Los padres de hoy en día son jóvenes y tienen poco tiempo pero quieren hacer las cosas bien. Hoy se tienen uno o dos hijos como mucho y nuestras abuelas tenían cuatro, cinco o más, por lo que aprendían muchas cosas y mandaba la experiencia. Por eso el nuevo libro, que pone en uno solo lo que se puede encontrar en diez o doce guías separadas. Es útil en ese sentido.

-El título 'Pediatría con sentido común', ¿es que no se aplica a la hora de ser padres?

-Muchas veces lo pierden aunque quieran hacerlo bien. El sentido común se adquiere con la información. Una madre que ha leído sabe y se vuelve más tranquila, por lo que el libro se basa en conocimientos científicos y está avalado por la Sociedad Española de Pediatría.