A la luz de la luna tuvo lugar ayer la ceremonia dedicada a repartir los premios Prestigio a los elegidos de este año. El alcalde, José Torres Hurtado, asistió al evento y la periodista Encarna Jiménez fue la encargada de difundir el discurso de inauguración.

Los afortunados fueron la empresa de diseño Enrique Loewe, el hotel Villa Oniria, la firma hotelera Dauro y el restaurante La Cueva. Pero el galardón de honor fue otorgado al Festival de Música y Danza de Granada, por la promoción que ha hecho, a lo largo de sus sesenta años de vida, de la esencia granadina a través de su magnífica programación cultural y musical.

El director del festival, Diego Martínez, declaró a este periódico que es un honor para todos los que componen la organización recibir este premio de parte de la ciudad. "Todas las personas que trabajamos en el festival nos sentimos honradas y orgullosas con este premio, que como su nombre indica, es prestigioso", afirmó. Por otro lado, Martínez declaró que este galardón supone una motivación para seguir trabajando y continuar exportando la marca de Granada fuera de la provincia y del país.

"El festival, además de ser un conjunto de maravillosas actuaciones, es también una herramienta de desarrollo económico y cultural para toda la provincia" declaró ayer.

Según explicó Martínez, el festival tiene dos esencias fundamentales que lo hacen especial y único. Por un lado está su excelencia musical, con una experiencia de sesenta años, en los que han participado los mejores solistas, los mejores directores y las mejores orquestas. Por el otro lado, un punto fundamental, es la riqueza patrimonial. "La marca Granada vende mucho, el festival tiene mejor acogida que si procediera de otra ciudad", aseguró.

El director del Festival de Música y Danza de la ciudad define la ciudad de forma sublime, "Granada es un conjunto de riqueza patrimonial y riqueza musica".