Granada

Sí a la calidad, no a los incentivos

  • Profesores de Primaria y Secundaria se manifestaron ayer contra el nuevo Plan de Calidad de la enseñanza · Los convocantes calculan que hubo un seguimiento de la huelga del 60% en la provincia

Que hay que hacer algo para mejorar la calidad de la enseñanza es algo que pocos ponen en duda, menos aún tras los resultados que obtuvo Andalucía en el informe PISA. Ahora bien, el camino a seguir para alcanzar este objetivo es el punto en el que la Consejería de Educación y los profesores de Primaria y Secundaria que hicieron huelga ayer no logran ponerse de acuerdo. "Sí a la calidad en la educación, no a los incentivos" fue la consigna más coreada ayer en las manifestaciones de profesores que se celebraron en varias ciudades andaluzas contra el Plan de Calidad de la enseñanza.

En la provincia de Granada, CGT, uno de los sindicatos convocantes de la huelga, junto con APIA, SADI, SIEP y USTEA, cifró en el 60% la proporción de docentes que secundaron el paro, aunque apuntó que se alcanzaron cifras superiores en la Costa, donde estima que se sumaron a la huelga entre el 70 y el 75% de los profesores, mientras que en la capital se quedaron en el 40%, algo que opinan que estuvo condicionado por la jornada festiva. Fue precisamente la celebración de ayer lo que motivó que en lugar de organizarse una concentración en Granada, los profesores que secundaron la huelga se desplazaran a otras ciudades a manifestarse.

Los detractores del nuevo plan de calidad consideran que con él se carga a los profesores con toda la responsabilidad del mal funcionamiento de la enseñanza, instaurando unos incentivos, mientras que lo que es necesario en su opinión es una mayor inversión en Educación. Las reivindicaciones de la jornada de huelga de ayer, junto con la retirada del plan, se referían a mejoras en las condiciones laborales, entre ellas una reducción de horario y estabilidad para el personal interino, así como a una serie de medidas necesarias a su juicio para mejorar la calidad de la enseñanza, como la reducción de la ratio de profesores por alumno, el incremento de la inversión en Educación hasta el 7% del PIB y el aumento de las plantillas, tanto de personal docente como no docente (monitores, trabajadores sociales, sanitarios, psicólogos...). El salario es otro de los asuntos conflictivos. Los manifestantes demandan una subida de 300 euros mensuales para todo el profesorado en compensación de la perdida del poder adquisitivo y de homologación salarial, ya que argumentan que ésta es la diferencia que los separa de la media en España. Sin embargo, los sindicatos que sí han apoyado el Plan de Calidad, donde se incluyen las formaciones mayoritarias, CCOO y UGT, firmaron ya la homologación retributiva en unas condiciones que los sindicatos minoritarios consideran injustas e insuficientes.

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