La empresa de transportes Rober ha presentado, junto a City Sightseeing (la sociedad que explota el servicio del autobús turístico en Granada) una propuesta para desarrollar el vehículo turístico que conectará la ciudad con la Alhambra. Asociados en una Unión Temporal de Empresas (UTE), el tándem competirá por el servicio junto a otros tres proyectos desarrollados por Autocares Juliá y El Tren Progresa S. L.; Trenes y autobuses Turísticos Alhambra S. L.; y la UTE formada por Classic Bus S. L., Autocares S. L. y Transportes Gil-San.

De momento, el único proyecto que reúne todos los requisitos administrativos para hacerse con el contrato es el de Autocares Juliá y el Tren Progresa S. L. (empresa esta última creada el pasado 8 de enero de 2013). Las otras tres opciones han tenido que volver a presentar la documentación requerida para acceder al siguiente escalón del proceso: la valoración de los diseños de los vehículos.

En el pliego de prescripciones técnicas, el Ayuntamiento justifica la creación de un circuito turístico por las zonas más emblemáticas de la ciudad como la Alhambra, el Albaicín y el centro histórico, en la necesidad de potenciar los servicios turísticos que se prestan a los visitantes de la ciudad. Curiosamente, este servicio ya lo presta la empresa City Sightseeing, previo pago eso sí, de cerca de 100.000 euros al año al Ayuntamiento en concepto de canon.

Claro que el nuevo medio de transporte, muy frecuente en pueblos costeros, será bastante más barato que este servicio turístico, que actualmente tiene un coste de 15 euros.

La apertura de este concurso fue fruto del acuerdo alcanzado hace unas semanas entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Granada para sacar adelante la iniciativa, con la que se pretende mejorar la accesibilidad al monumento y darle al turista la posibilidad de disfrutar del resto del patrimonio que ofrece Granada, de su gastronomía y su cultura.

La intención del Ayuntamiento es que sea un vehículo con un diseño de última generación, preferiblemente eléctrico y que no haga ruido, aunque el pliego de condiciones es bastante flexible en este sentido y serán las empresas las que decidan las características del transporte, su frecuencia, su itinerario y su precio, toda vez que no se tratará de un servicio público subvencionado.

Respecto al itinerario, serán las empresas las que hagan las propuestas, si bien es condición sine qua non que el vehículo parta de las taquillas de la Alhambra y descienda por la Cuesta de Gomérez. El itinerario debe completar, como mínimo, el paso por la Alhambra y sus bosques, plaza Nueva, Carrera del Darro, Albaicín, La Granada Renacentista, el centro comercial y el Realejo.

El adjudicatario podrá hacer esporádicamente, previa autorización municipal, itinerarios singulares con motivo de eventos y actos especiales. La futura concesionaria debe tener en cuenta que el servicio de transporte de turistas se debe realizar por las zonas donde no acceden los autobuses turísticos tradicionales y establecer nuevos itinerarios de interés para el conocimiento de los valores históricos y patrimoniales de la ciudad y para su impulso económico.

El plazo de duración del contrato se ha establecido en diez años, que empezarán a contar a partir de la fecha de formalizacion del contrato, pero podrá ser prorrogable hasta cinco años más. El servicio deberá ponerse en marcha como máximo en los tres meses siguientes a su formalización. Durante el acto de presentación del proyecto el pasado 8 de marzo, el alcalde de la ciudad anunció que el vehículo debería estar funcionando en el mes de mayo.