El Ayuntamiento de Armilla (conformado por PSOE, IU y un ex edil de IDEA) anunció ayer que no recurrirá la sentencia que anula la celebración de la Junta General de Fermasa celebrada el pasado 28 de enero por un "defecto de forma" al no constar en la convocatoria la hora de la misma. Al constatar el error "la empresa lo notificó de forma inmediata al día siguiente".

En un comunicado, el Consistorio armillero consideró esta situación "un revés sin importancia" que no supone "quebranto alguno" para el funcionamiento de la empresa y decidió no dedicar "más tiempo ni dinero público" a este asunto y convocar nuevas juntas y consejo de administración para este martes 25 de junio en el que se pretendía ejecutar la sentencia judicial, y que finalmente han sido aplazadas para el próximo 1 de julio "ante la imposibilidad de practicar las notificaciones a los concejales del PP y de UPyD".

Según el Consistorio, determinados concejales del PP "no pudieron ser notificados por estar ausentes en sus domicilios y tras reiterados intentos durante dos días del servicio de notificación del Ayuntamiento y de la Policía Local", según los informes correspondientes, y los ediles de UPyD "devolvieron la mañana de este martes, fecha de celebración, las notificaciones recibidas en sus domicilios y recogidas por sus familiares".

El equipo de Gobierno se mostró ayer sorprendido por la actitud del PP que, en lugar de buscar soluciones para Fermasa, obstaculiza continuamente su normal funcionamiento" e indicó al portavoz del PP en el Ayuntamiento, Antonio Ayllón, "que su papel como presidente de Fermasa ha consistido en sumir a la institución en una parálisis absoluta y en dejarla inmersa en un ERE que afecta a la totalidad de la plantilla, mientras que simultáneamente, blindaba el contrato de un alto directivo de Fermasa".