"La situación está muy mal. Aunque digan que ya estamos saliendo, nosotros no lo notamos y cada vez más gente necesita ayuda". Así de tajante se mostró ayer el presidente de Cruz Roja Granada, Francisco Escribano, que sigue demandando ayuda para las miles de personas y de familias que se están viendo azotadas por la crisis. Sus voluntarios, que dedican horas a intentar que estas personas no caigan en el pozo de la pobreza o la exclusión social, son los que conocen el día a día, la realidad de lo que se vive en la calle. "Y aunque en lo macroeconómico digan que vamos mejor, en las casas no se nota", dijo.

De enero a septiembre, la ONG ha atendido en los diferentes proyectos de lucha contra la pobreza a 11.454 personas, a las que ayudan con alimentos, prestaciones económicas directas o el pago de recibos de alquiler o suministros, entre otras cosas.

Y Cruz Roja ha puesto el acento en el origen de sus usuarios. "Ya no son sólo inmigrantes sino que son amigos, vecinos de nuestras casas que han vivido bien hasta ahora y que son nuestros nuevos 'clientes'. La emergencia está en nuestros barrios", matizó Escribano. Así, en la actualidad el 68,75% de las personas atendidas por Cruz Roja en los programas de Lucha contra la pobreza son granadinos o nacidos en España (7.850 personas) mientras que el 31,25% restante (3.568) han nacido en otro país, tienen otra nacionalidad. Un porcentaje, el de españoles afectados por la crisis, que se ha multiplicado desde que comenzó la debacle del sistema económico.

A estos proyectos de lucha contra la pobreza, Cruz Roja ha destinado más de 346.000 euros recaudados en el marco del llamamiento 'Ahora más que nunca'. Además, han repartido 260.613 kilos de alimentos que han sido valorados en más de 302.000 euros.

Han atendido también en este año a 1.564 personas en su programa de empleo para conseguir que las familias en riesgo tengan alguna oportunidad laboral; y a 1.204 niños dentro del programa de juventud.

"Vamos a seguir pidiendo ayuda porque hay que seguir pagando la luz, los recibos de las casas,... Hay muchas personas en situación grave, muchas familias en una situación desastrosa y vamos a seguir ayudándoles con empeño. Hay que ir ganando batallas para ganar la guerra", aseguró el presidente provincial de Cruz Roja.

Desde Cruz Roja se ayuda a estas familias en muchos frentes: cobertura de necesidades básicas, alimentación, higiene, salud, pago de suministros, acompañamiento para el empleo, formación de parados de larga duración o reparto de material escolar.

La ayuda a la alimentación y a las necesidades básicas son las más utilizadas. Así, por ejemplo, el programa Alimentos para la Solidaridad -consistente en la entrega de alimentos no perecederos donados por la Unión Europea- atiende en la actualidad a más de 7.100 personas. Estos usuarios acuden a Cruz Roja a por su bolsa de alimentos periódicamente. También en el ámbito alimenticio tienen un programa con Carrefour en el que entregan tarjetas de 30 euros para que las familias compren directamente en el hipermercado. De esta forma pueden adquirir productos perecederos que no se incluyen en los lotes de alimentación preparada.

La media de edad de los beneficiarios de estos programas de lucha contra la pobreza oscila entre los 24 y los 54 años. De hecho, el 55% de las personas atendidas en lo que va de año están en ese grupo. En cuanto al sexo, el 49% de las personas que participan en estos proyectos son mujeres (5.740) frente al 50,27% (5.740) que son hombres.

En total, sumando los beneficiarios del programa de intervención social (11.454), más los de empleo (1.564) y juventud (1.204), se atiende en este marco de crisis a 14.222 personas.