Después de más de dos décadas de militancia, Luis Salvador le dice adiós al PSOE. Y no lo hace por la puerta de atrás, ni mucho menos. El que fuera senador socialista por Granada entre los años 2004 y 2011 y candidato a liderar el partido en la provincia, se va del PSOE criticando a las direcciones federal y andaluza por permitir "una caída espectacular del apoyo ciudadano y una huida de la militancia". Por convertir al partido, en definitiva, en "un instrumento prescindible" y una formación "irreconocible" que "ha perdido sus orígenes y sus señas de identidad".

Salvador deja el PSOE, pero no la política. El ex senador socialista aseguró ayer que quiere "seguir construyendo" y, puesto que era una labor imposible bajo las siglas del que hasta ahora era su partido, se ha unido al Movimiento Ciudadano que promueve el líder de Ciutadans, Albert Rivera. Una plataforma civil que podría dar el salto a la política de cara a las próximas elecciones y que defiende un cambio en la agenda de los grandes partidos para acercarse a la ciudadanía.

En una carta enviada por burofax al secretario de Organización del PSOE, Óscar López, Salvador detalla algunas de las razones por las que ha decidido abandonar sus siglas. El ex senador asegura que sus intentos por promover cambios en la organización, por "ajustar el reloj del PSOE y ponerlo en hora con las demandas de los ciudadanos", se han dado contra un muro. Especialmente desde que diera "un paso más ante la situación de deterioro permanente" del partido y presentara su candidatura a la Secretaría General de Granada. Desde entonces, indica Salvador, constató "que la integración ha sido sustituida por la exclusión".

Una afirmación que el ex senador refuerza ante las primarias exprés en Andalucía, la convocatoria de un Congreso Regional Extraordinario por el sistema de delegados y la "desaparición" de la Conferencia de Organización que debería haber aportado cambios estructurales al partido por una Conferencia Política "con delegados elegidos a dedo" en cada región. "El partido ha decidido no cambiar", indicó Luis Salvador, que precisamente durante los últimos meses ha formado parte del Foro Ético y de Socialismo y Ciudadanía para realizar aportaciones a esa "diluida" Conferencia de Organización.

El ex socialista aseguró que su decisión de dejar el PSOE es "un ejercicio de coherencia en el servicio público", puesto que considera que "ha llegado el momento" de aportar su esfuerzo en otros ámbitos. Lo que no significa que renuncie a sus "ideales" o a su compromiso político. "Soy un socialdemócrata convencido", apuntó.

El ex socialista reconoció que Movimiento Ciudadano pretende "buscar coincidencias" y permitir que todo el que tenga algo que aportar, independientemente de su tendencia política, pueda hacerlo. Eso sí, la plataforma tiene algunos "planteamientos incuestionables", como la defensa de la Educación y la Sanidad públicas, la necesidad de acordar un Pacto de Estado en materia educativa que impida cambios legislativos con cada nuevo Gobierno o la implantación de una nueva Ley Electoral y de listas abiertas.

Sobre el futuro político de esta plataforma -a la que se han unido otros movimientos ciudadanos y cuyo manifiesto cuenta ya con más de 26.000 firmas-, Salvador explicó que la idea es que los cambios que promueve se hagan "por las buenas" (es decir, que sean PP y PSOE los que los lleven a cabo) o "por las urnas". En cualquier caso, el ex senador aseguró que su papel en el Movimiento Ciudadano o en un futuro partido político se resolverá "partido a partido" y que ahora lo importante es "convencer a un ciudadano más que a su vez lo recomiende a otros".