Lo de la TDT se ha convertido en un culebrón que parece no tener fin. Después del apagón analógico, la proliferación de canales y las periódicas vueltas al mando para resintonizar llega un nuevo capítulo. Está previsto que antes de junio el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo anuncie cómo se va a desarrollar el dividendo digital, un proceso que prevé 'liberar' las frecuencias en la que actualmente emiten los canales de la TDT para que puedan ser empleadas por la tecnología 4G de telefonía móvil que permite, por ejemplo, una mayor velocidad en el uso de internet en los celulares. Este proceso culminará, si no hay una nueva marcha atrás, el 1 de enero de 2015. Para ese día, las comunidades de vecinos deberán haber adaptado los amplificadores de sus antenas, un proceso que, de media y según los cálculos ofrecidos por el propio Ministerio, rondarán los 20 euros por hogar.

Según las mismas fuentes, a nivel nacional todo el proceso de 'traslado' de la señal de una frecuencia a otra tendrá un coste de unos 200 millones de euros, cuantía que, siempre según Industria, tendrán que asumir los usuarios. También se apunta que la modificación del amplificador sólo afectará a los bloques de viviendas, ya que, aseguran, las viviendas unifamiliares no tendrán que hacer ningún cambio. "Si es un bloque, sí hay que tocar el amplificador y eso tiene un coste, sí", indican desde Industria, que añade que "las unifamiliares no tendrán que hacer nada".

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de los Censos de Población y Vivienda de 2011, en la provincia de Granada hay poco más de 44.000 edificios con tres o más plantas destinados a viviendas, o lo que es lo mismo, unas 44.000 comunidades de vecinos que tendrán, más pronto que tarde, que llamar al antenista y pedir presupuesto.

Los detalles del proceso se conocerán cuando Industria publique el plan y, sobre todo, cuando se inicie la campaña publicitaria que está prevista y se ponga en marcha un teléfono de atención al ciudadano. Se prevé que, en un principio, el proceso sea progresivo y para ello se dividirá el territorio nacional en zonas. Además, se garantiza que todos los canales -excepto los nueve que dejarán de emitir el próximo 6 de mayo- seguirán viéndose a partir del 1 de enero de 2015.

Desde la Asociación Andaluza de Empresas Instaladoras de Telecomunicaciones (Faitel) se opta por la cautela ante la falta de información. La Asociación ve incluso precipitado el cálculo ofrecido por el Ministerio de Industria sobre cuánto le costará a cada hogar granadino adaptar la antena a la nueva franja. "Hasta que no tengamos el Real Decreto en la mano y sepamos las características técnicas no se puede hacer un cálculo del gasto", indican desde Faitel, que también apunta que el proceso no tiene por qué costar lo mismo en Granada que en otra provincia. "No se nos ha dicho cómo se ha hecho ese cálculo ni sabemos si esas estimaciones son correctas". Pero como no es la primera vez que se anuncia este cambio en las frecuencias, sí se puede ver qué se estimó el año pasado, cuando estaba previsto que el dividendo digital concluyera el 1 de enero de 2014. En enero de 2013 Faitel previó que el coste de adaptación de las antenas colectivas de la provincia podía ascender a los seis millones de euros, mientras que la reantenización de las individuales supondría otros 32 millones.

Faitel tampoco ve claro que el dividendo digital únicamente afecte a los bloques de viviendas. En este sentido apuntan que las pruebas realizadas entre 2012 y 2013 sobre cómo podrían convivir la nueva señal de televisión con la tecnología 4G indican que sí podría haber incidencias en las antenas individuales.