El comité de empresa de Eozen, empresa dedicada a la fabricación de aerogeneradores y que ha entrado en concurso de acreedores, afirma que la viabilidad de la compañía está "en el aire", a expensas de que se encuentre la financiación necesaria para acometer el contrato con la firma alemana Vensys para la fabricación de 301 palas por un importe de 42 millones de euros.

La administración concursal ha expuesto a los trabajadores que la empresa intermediaria que debe hacer el molde para la fabricación de estas palas, que incorporan una tecnología nueva en el mercado, debe conseguir una financiación de cuatro millones de euros y Vensys le ha dado un plazo de una semana para hacerlo.

Desde el comité de empresa explicaron ayer que inicialmente esta financiación estaba apalabrada con Bankia, pero al entrar Eozen en concurso de acreedores ha puesto una serie de condiciones que la empresa intermediaria "no puede cumplir". "Si no se encuentra la financiación nos veremos abocados a la liquidación porque sin contrato no hay viabilidad", lamentaron los trabajadores, quienes explicaron que la única carga de trabajo que podría encontrar Eozen vendría de la mano de este contrato.

Este pedido supondría concretamente la fabricación de 301 palas de 57,7 metros por importe de más de 42 millones de euros, garantizado la actividad durante los próximos seis años y permitiendo que esta empresa situada en Ferreira se posicionara como fabricante en el mercado eólico internacional.

Las mismas fuentes explicaron que hasta la fecha tampoco se ha avanzado para encontrar una solución que garantice la viabilidad económica de la empresa.