Hay menores que por su situación dentro del entorno familiar, necesitan un recurso educativo mayor aparte del colegio. El estado de crisis actual hace que los más pequeños sean los más vulnerables de nuestra sociedad, por lo que desde noviembre de 2013 el Ayuntamiento de Granada comenzó un proyecto social de ayuda a estos niños con la puesta en marcha de cuatro centros de día, un recurso novedoso dirigido a desarrollar actuaciones socioeducativas orientadas a la erradicación de situaciones de riesgo de los menores detectadas en los servicios sociales comunitarios y en los equipos de tratamiento familiar, favoreciendo así el bienestar de los niños los 365 días del año.

En total, 154 menores (de 6 a 16 años) y 100 familias se han beneficiado de las actuaciones de estos cuatro centros de día, ubicados en la zona Norte, La Chana, el Albaicín y en el distrito Ronda. Cada uno de ellos atiende a más de 30 menores, y para el año próximo el Consistorio quiere ampliar el número de plazas en cinco por cada centro, según afirmó ayer el alcalde en funciones Francisco Ledesma, que acudió al centro de día del Albaicín acompañado del concejal de Familia y Bienestar Social, Fernando Egea. Asimismo, el presupuesto previsto actualmente es de 142.800 euros, destinando 35.700 euros a cada uno de los centros. Para el año que viene Ledesma manifestó que "se quiere ampliar dicha aportación en 6.000 euros más por cada centro".

En el Centro del Albaicín se encuentran menores como Leticia Álvarez, una pequeña de 5 años que aseguró "pasárselo muy bien" realizando actividades como ir a la piscina, a la granja escuela, o realizando manualidades como pulseras de gomaeva. José Hervías, otro de los menores, gracias a esta actuación del Ayuntamiento pudo gozar de una semana en Benidorm con las educadoras del centro. "La experiencia ha sido muy agradable, fuimos a una playa estupenda y visitamos Aqualandia. Me gustó mucho", contó.

Aquellos pequeños que no fueron a la costa valenciana se quedaron con sus familias en las playa granadinas. Natalia María Gómez fue una de ellas, que visitó tres días una casa con más familias, en la que se tuvieron que repartir las tareas como la comida o la limpieza. "A mí me gusta estar aquí porque somos como una gran familia, además en mi casa me aburro y aquí hago muchos talleres, visitas y actividades", explicó Natalia.

Los centros están abiertos durante todo el año fuera del horario escolar, y en verano de 9:30 a 14:30 y de 18:00 a 21:00 horas.