El Metro de Granada es bien visible. El hecho de que recorra en superficie más del 80% del trazado hace que la infraestructura no pase desapercibida. Pero, por el momento, en los 2,7 kilómetros que transcurre soterrado por la capital los signos del Metro son pocos, dejando a un lado el 'doloroso' recuerdo de las obras. Pues bien, eso cambiará a partir del mes de noviembre, cuando la Consejería de Fomento y Vivienda comenzará a instalar once las bocas de metro que darán acceso a las estaciones subterráneas de la infraestructura. Estos 'edículos' albergarán las escaleras mecánicas y pedestres que llevarán a los vestíbulos principales de cada estación.

Antes de la colocación de estos signos visibles del Metro, la Junta de Andalucía ha iniciado las obras de arquitectura interior de esas estaciones subterráneas situadas bajo el Camino de Ronda y la avenida de América, unas tareas que finalizarán previsiblemente en febrero del próximo año.

Estas labores consisten en la terminación de los cuartos técnicos, que albergan las instalaciones que dan funcionalidad a las estaciones, y en la pavimentación y revestimientos de los vestíbulos y zonas de andén.

Según detalló ayer la Junta de Andalucía, en los 2,7 kilómetros del Metro de Granada que discurren bajo tierra por la capital se ubican las estaciones subterráneas de Méndez Núñez, Recogidas y Alcázar Genil.

Una vez finalizados los trabajos de ejecución de la infraestructura y del montaje de las vías, tanto en el túnel como en las estaciones, han comenzado las labores de albañilería de los cuartos técnicos.

Estos cuartos albergan las instalaciones eléctricas, ventilación, protección contra incendios, fontanería, saneamiento, así como los trabajos de suministro y colocación de los ascensores y escaleras mecánicas.

En la estación de Alcázar Genil, la estación que alberga los restos almohades del siglo XIII, se están llevando a cabo las tareas de pavimentación y muestran ya un aspecto de acabado final.

Las estaciones de Metro de Granada cumplen con los parámetros de seguridad, accesibilidad y funcionalidad que se requieren al servicio de transporte público. La Junta de Andalucía destacó que los vestíbulos son amplios y diáfanos, con mobiliario funcional y en los que se podrá llevar a cabo la compra y recarga de los títulos de viaje y la información al usuario del Metro.

En cualquier caso, cuando se habla de Metro se habla de polémica. Ayer el portavoz del PP-A en el Parlamento de Andalucía, Carlos Rojas, denunció que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, marginara a Granada y no mencionara en ningún momento a la provincia o sus infraestructuras durante el Debate sobre el Estado de la Comunidad andaluza.