Contratos parciales para jornadas de ocho horas, 'colaboraciones' sin alta en la seguridad social, empleados bajo cuerda que siguen cobrando su prestación por desempleo, contratos temporales encadenados que hace años que debían ser indefinidos... El catálogo de malas prácticas en el mundo laboral, en un momento en el que la crisis no ha remitido y la actividad sigue bajo mínimos, ha crecido de forma inversamente proporcional a la calidad de las condiciones de trabajo. La picaresca que tan a menudo se asocia al fraude no ha hecho más que crecer en los últimos siete años, al igual que el esfuerzo de las administraciones por controlar una situación que no tiene visos de remitir.

Estos dos factores -la mayor 'inventiva' de empresarios sin escrúpulos para bordear la ley y la mayor labor inspectora- han desembocado en una cifra sin precedentes de empleo sumergido aflorado. Según el último informe anual de la Inspección de Trabajo, referente al año 2013, este organismo ha sacado a la luz en Granada 1.453 puestos de trabajo irregulares y ocultos a la administración. Lo que se traduce en que, a lo largo del último año, los inspectores granadinos han aflorado cuatro empleos sumergidos cada día.

Esta cifra marca un nuevo récord en los años de la crisis. Nunca antes desde que se desencadenó la que ha llegado a ser una de las más serias recesiones de la historia reciente habían salido a la luz tantos contratos irregulares. Las altas promovidas por los inspectores que trabajan en Granada han aumentado un 13,1% en el último año, pasando de las 1.285 del año 2012 a las 1.453 de 2013. Los contratos aflorados no han hecho más que crecer desde el año 2008, cuando se contabilizaron 395 altas promovidas por la Inspección. En 2009 ya fueron 606; en 2010, 765; en 2011, cuando se dio el salto cuantitativo más contundente, 1.197; en 2012, 1.285; y en 2013, por fin, 1.453.

El aumento de los contratos irregulares aflorados tras la actividad de la Inspección de Trabajo ha sido paralelo al incremento de la actividad inspectora, que también ha ido en consonancia con la crisis. La actividad de la Inspección de Trabajo en economía irregular ha experimentado un impulso en el último año del 19%, pasando de las 9.968 actuaciones en Granada durante 2012 a las 11.867 de 2013. Las actuaciones concretas relacionadas con la falta de altas en la seguridad social también se han incrementado un 17,5%, pasando de las 7.774 de 2012 a las 9.134. A mayor actuación inspectora, mayor es el número de infracciones que se 'cazan'. En este último año se han detectado en Granada por parte de la Inspección de Trabajo 560 infracciones por falta de altas en la Seguridad Social, que ha derivado en esas 1.453 altas promovidas.

El balance de los años de crisis es bastante contundente, más aún teniendo en cuenta la limitación de la Inspección -por falta de medios y, sobre todo, de personal-. Desde 2009 la Inspección de Trabajo ha promovido el alta de 5.306 trabajadores que operaban en la economía sumergida, sin cotizar, sin protección y sin derechos oficiales.

La lucha contra la economía irregular centra buena parte de los esfuerzos de la Inspección de Trabajo. Según la memoria de este organismo adscrito al Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en el último año la delegación granadina ha llevado a cabo 11.867 actuaciones contra la economía irregular, un 44,5% del total del trabajo realizado a lo largo del ejercicio, que superan la cifra de 26.653 actuaciones. Este 'punto' negro del sistema laboral se incluye dentro de las 15.248 actuaciones en materia de Seguridad Social, que centra buena parte del trabajo de los inspectores. Le siguen las actuaciones relacionadas con la prevención de riesgos laborales, con un total de 7.577; las actuaciones relacionadas con empleo y relaciones laborales, con 2.562; y las realizadas en materia de empleo y extranjería (663).

En el ámbito de la Seguridad Social, las infracciones en la inscripción, afiliación y alta, así como los retrasos, son una de las principales preocupaciones de la Inspección, que ha llevado a cabo a lo largo del año 9.481 actuaciones en este sentido, que han 'cazado' 560 infracciones.

Las actuaciones en materia de Seguridad Social también siguen el rastro del dinero. Son muchos los empresarios que, además de escatimar en derechos laborales, intentan hacerlo con la Seguridad Social. De ahí que la Inspección haya recaudado durante el último año más de 15,2 millones de euros de cuotas impagadas a la Seguridad Social por empresas de la provincia. Esta cifra, derivada de 1.304 infracciones detectadas, es bastante superior a la registrada en años anteriores. En 2012, por ejemplo, el importe de los expedientes liquidatorios era de 13,6 millones de euros, lo que significa que la actividad inspectora ha recuperado un 12,2% más de cantidades no declaradas a la Seguridad Social.

En los últimos años, las cantidades recuperadas para la Seguridad Social han ido aumentando de forma gradual. Si en el último año se ha sumado más de un millón y medio de euros a esos expedientes liquidatorios impuestos por la Inspección de Trabajo, la diferencia con el año 2011 es todavía mayor. Por aquel entonces sólo se recuperaron para la Seguridad Social 5,4 millones de euros de impagos, una cifra sensiblemente inferior a la del año anterior, cuando se llegaron a recaudar por esta vía 9,5 millones de euros.

En esa línea de trabajo de afloramiento del empleo 'negro' o irregular, la Inspección de trabajo ha detectado en Granada durante el último ejercicio 817 contratos en fraude de ley, además de 26 infracciones por subcontratas en obras de la construcción. Estas infracciones han derivado en la conversión de 843 contratos temporales en indefinidos, tal y como debería haber sido antes de que los inspectores pusieran el pie en la empresa en cuestión.

El uso fraudulento de la contratación ha dado todavía más trabajo a la Inspección de Trabajo. Según la última memoria anual del organismo dependiente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, los inspectores destinados a cubrir la provincia de Granada han realizado 464 actuaciones concretas para evitar este tipo de actitudes, en las que se han revisado 2.553 contratos. De este trabajo han derivado siete infracciones y sanciones por valor de más de 5.000 euros.

En materia de extranjería, la Inspección de Trabajo ha llevado a cabo a lo largo del año 521 actuaciones, que han dado lugar a la detección de 31 infracciones relacionados con trabajadores extranjeros que no tenían permiso de trabajo, así como a sanciones por valor de 252.537 euros.