Granada

Alpujarra, historia de un sabotaje

  • Sebastián Pérez exige explicaciones al PSOE y a la Junta después de haber orquestado una "estafa" en torno a la candidatura de la comarca a Patrimonio Mundial.

"El PSOE y la Junta han utilizado el engaño para tumbar a Granada. Una vez más han vuelto a dar la espalda a nuestra tierra". Así de contundente se mostró ayer el presidente de la Diputación, Sebastián Pérez. Un día después de conocer que la Alpujarra recibía el primer portazo en sus aspiraciones a proclamarse Patrimonio de la Humanidad, el máximo responsable de la institución provincial criticó duramente a los socialistas y al Ejecutivo liderado por Susana Díaz al haber apostado por la candidatura de Medina Azahara en detrimento de la Alpujarra.

Para argumentar su versión, Pérez mostró un documento del pasado 25 de junio que la Junta emitió al Ministerio de Cultura (con fecha de entrada dos días después) en el que la Consejería de Cultura solicitaba la inclusión de Medina Azahara en la Lista Indicativa de la Unesco de acuerdo a "los valores universales excepcionales que posee el conjunto monumental". Un papel que mostraba que "la estafa estaba consumada mucho tiempo antes".

Un síntoma que a juicio del presidente de la Diputación dejaba entre ver de ante mano que la decisión contra Granada "era firme". El 'popular' tuvo acceso al texto hace una semana gracias a que en su condición de senador solicitó información al Gobierno a través de la Cámara Alta en relación a este tema. Aunque la Junta podía haber hecho efectiva la presentación del expediente de la Alpujarra a lo largo de la sesión del Consejo del Patrimonio Histórico celebrada el pasado martes, Pérez aseguró que el organismo dependiente del Ministerio de Cultura preguntó a la Junta el lunes si iba a entregar junto a Medina Azahara la documentación de la propuesta granadina.

Preguntado por qué no denunció este caso antes de la reunión del Consejo del Patrimonio, el máximo representante de la Diputación indicó que "antes de ser presidente del PP", es granadino y vela "por los intereses" de su tierra, cuestión por la que -confesó-ha pasado los días "más duros" desde que llegó al cargo en 2011.

A tenor de este "escándalo mayúsculo", el presidente de la Diputación culpó a la secretaria general del PSOE en Granada, Teresa Jiménez, de la división escenificada en la última semana entre partidos y administraciones. A juicio de Pérez, "esta señora, natural de  de Lanjarón, entonó el antes muerta que sencilla" con el fin de sepultar las posibilidades a la candidatura granadina.

También criticó duramente al consejero de Cultura, Luciano Alonso, a quien tachó de "farsante" al igual que a la presidenta Díaz. Por la actitud adoptada por todos ellos en los dos últimos años -especialmente desde hace un mes-, Pérez dijo que "dimitirían si tuvieran la mitad de la mitad de la dignidad del diputado Francisco Tarifa".

Y es que en esta contienda abierta el equipo de gobierno de la Diputación ha perdido a un integrante en el camino, el responsable de Turismo. En relación a esta renuncia, el 'popular' destacó el gesto de "honradez política" demostrado por Tarifa y recalcó que "no es merecedor de la trampa que le ha hecho el PSOE".

La rebelión de los alcaldes socialistas de la Alpujarra fue el motivo por el que se produjo esta situación. Sobre este asunto Pérez lamentó ayer que los regidores hayan exigido información y consenso cuando "han sido plenamente informados y asistidos". Avalado por un completo dossier, el presidente de la Diputación desmontó la posición de los representantes municipales.

Los ayuntamientos se han dividido en tres bloques en función del grado de protección jurídica cultural a la que estarían sometidos por la declaración para lograr una información "personalizada y precisa". De los 27 consistorios, 21 participaron en alguna de las convocatorias comunicadas desde el 9 de septiembre de este año. Para confirmar esa actuación, Pérez presentó ante los medios los certificados de correo postal además de las confirmaciones de lectura de los correos electrónicos o llamadas telefónicas realizadas.

En rueda de prensa, el presidente de la institución provincial desveló que los seis ayuntamientos restantes hasta llegar a los 27, "nunca han participado" en las mesas técnicas y en los grupos de trabajo. Entre ellos, Órgiva, Nevada y Válor. Sus respectivos alcaldes juntos a otros colegas comparecieron públicamente en la sede del PSOE para denunciar el desconocimiento del proyecto. Para desmontar esta teoría, Pérez recurrió a la web de los consistorios de Alpujarra de la Sierra y Nevada -dos de los más díscolos- donde "se da la paradoja de que sus páginas web figura la documentación íntegra del expediente".

La política de confrontación fue adoptada en los pueblos para "desmontar como fuera" la entrada en la Lista Indicativa. Pérez comentó que Teresa Jiménez ha enviado a la alcaldesa de Órgiva, María Ángeles Blanco, la orden de recorrer toda la comarca para "meter miedo". Como ejemplo citó que el socialismo como si se tratara de "un virus letal" llegaron a decirle a los vecinos que con la declaración "se iban a tener que quitar las ventanas de las viviendas, se iba a impedir la caza, la eliminación de secaderos de jamón en Trevélez...", señaló.

Según la Diputación, el boicot del PSOE al proyecto da inicio el 12 de noviembre cuando se promueven mociones en Torvizcón, Bérchules, Alpujarra de la Sierra, Cástaras, Lobras, Nevada y Soportújar. Esa tendencia se intensificó con la petición de la retirada de la candidatura por "un grave error de procedimiento", en boca de José Entrena, vicesecretario general del PSOE en Granada y portavoz socialista en la Diputación. Una actitud que Sebastián Pérez tachó de "inaudita".

En contraposición, la defensa a ultranza del proyecto granadino frente al cordobés -Pérez instó a la Junta a que presentara a la Alpujarra en solitario- le ha valido al 'popular' un "chorreo de críticas histórico" en la provincia vecina para quien tuvo elogios después de conseguir que Medina Azahara accediera a la Lista Indicativa.

Eso sí recriminó que desde Sevilla se haya apostado por una candidatura que cuenta con un expediente de  "tan sólo 10 folios" -la propia Junta reconoció que la documentación era "flojita"- frente "a los 1.242 repartidos en dos carpetas gigantescas" con los que la Alpujarra aspiraba a presentarse ante el Consejo del Patrimonio. Un trabajo desarrollado por la Universidad de Granada (UGR). Al respecto, Pérez incidió en que la UGR (cuyo rector es el presidente de la comisión del proyecto) se ha visto "gravemente dañada".

El 'popular' tiró de hemeroteca para reafirmar la incongruencia entre las declaraciones protagonizadas por representantes socialistas en el pasado en comparación con la de los últimos días. Incluidas las palabras del consejero de Turismo de la Junta, Rafael Rodríguez (IU), quien hablaba de "una oportunidad para reforzar la oferta turística de Granada". A juicio de Pérez, el viraje en la estrategia se debe "al 100% por motivos electoralistas".

Sobre el futuro de la candidatura de la Alpujarra, Sebastián Pérez fue claro: "No es el final, no voy a dejar el proyecto en la estacada. Antes o después la Alpujarra será Patrimonio Mundial, lo voy a luchar hasta la extenuación".

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