Granada

Los curas empezarán a 'fichar' el día 7 y no podrán acercarse a las víctimas a menos de 200 metros

  • Del Río, convencido de que el juez tomará la decisión "necesaria" para "evitar" la prescripción de los casos El joven Daniel sigue confiando en la Justicia

Los autos que dictó el lunes por la tarde el juez de Instrucción número 4 de la capital, Antonio Moreno, acordando la libertad provisional con cargos para tres de los acusados de los presuntos abusos sexuales en la iglesia granadina y decretando prisión provisional eludible bajo fianza para el padre Román, que abonó de inmediato los 10.000 euros requeridos para evitar la cárcel, incluyen más medidas de control para los cuatro imputados: el padre Román, los sacerdotes Manuel M. y Francisco José C. y el profesor de Religión Sergio Q.

Según pudo conocer ayer este periódico por fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), las medidas de alejamiento para todos los imputados recogen la imposibilidad de acercarse a menos de 200 metros de las dos víctimas que hasta ahora han denunciado haber sufrido abusos sexuales por parte de un grupo que ha sido bautizado ya como el 'clan de los Romanones'.

Además, se impuso la obligación de comparecer quincenalmente en el juzgado para firmar. Los días que se han fijado para esta comparecencia de los imputados son los 7 y 21 de cada mes, de forma que el próximo 7 de diciembre será el primer día que los tres sacerdotes y el profesor tendrán que 'fichar' ante el juzgado, en principio en Granada -en el de guardia al ser domingo- aunque podrían hacerlo también en cualquier otro juzgado del país si se les da permiso.

Lo que no ha trascendido todavía es la definición de los delitos que se les atribuyen. Hasta ahora, están imputados dentro del título del Código Penal "contra la libertad e indemnidad sexual", en el que se recogen los delitos de agresión sexual, abuso, acoso y exhibicionismo y provocación sexual. Según fuentes consultadas por este periódico, todavía se está en fase inicial y en función de cómo transcurra la investigación y las declaraciones de los testigos o la aparición de nuevas denuncias, se establecerá el delito.

Mientras, continúa decretado el secreto de sumario, por lo que el expediente judicial se mantiene blindado y los detalles siguen saliendo con cuentagotas para no interferir en la investigación.

En cuanto a la posibilidad de que se efectúen nuevas detenciones, el director de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, dijo ayer en Málaga que desconoce por el momento si habrá nuevas detenciones y que dependerán de la autoridad judicial. Cosidó, según recogió Efe y Europa Press, recalcó que se trata de una investigación "judicializada" y que por el momento no hay novedades.

Por su parte, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, se mostró ayer "convencido" de que el juez instructor del caso "tendrá en mente la posibilidad de prescripción" de los delitos para "tomar las decisiones que sean necesarias para evitar que se produzca eso, en el caso de que hubiera que exigir algún tipo de responsabilidad". Así lo manifestó en Córdoba, donde resaltó que "ahora mismo lo que está claro es que la Justicia ha actuado con una diligencia enorme", si bien "lo que ocurre es que la denuncia ha llegado con un tiempo excesivo con respecto a los hechos y eso puede ser un problema, pero se valorará". En cualquier caso, defendió que "la diligencia que se ha puesto a nivel judicial o que ha puesto en este caso el fiscal y el juez de instrucción que lo lleva ha sido máxima", después de que "en una semana se ha hecho lo más inmediato y más perentorio en la toma de declaraciones y posibles registros".

En este sentido, el presidente del TSJA subrayó que "la diligencia es máxima", y a tal efecto, señaló que "ahora será el propio juez el que aborde la posible secuencia procesal".

Una vez concluidas las declaraciones del miércoles de los detenidos, la causa seguirá su curso y contará en principio con una acusación particular y una acusación popular. La acusación particular la ejercerá Daniel, el primer denunciante. De hecho, su abogado, según informó Efe, entregó ayer un escrito en el Juzgado para personarse en proceso una vez se levante el secreto de sumario. Aún no se sabe aún si el segundo joven también se personará como parte perjudicada. La acusación popular la pretende ejercer Prodeni, que ya anunció hace unos días esta intención.

Por su parte, Daniel reiteró ayer a través de su abogado, Jorge Aguilera, que mantiene su "absoluta confianza" en la Justicia después de que se dejara en libertad con cargos a los cuatro imputados. Según Aguilera, que indicó que, pese a que no conoce el contenido del procedimiento por el secreto de sumario, el denunciante considera que la decisión que ha adoptado el magistrado Antonio Moreno ha debido de ser "ponderada y mesurada" y adoptada en función de las pruebas reunidas.

El letrado admitió la dificultad existente para reunir las pruebas sobre los supuestos abusos cometidos porque "no es lo mismo que unos hechos se hayan cometido hace dos meses que en 2008 o antes". El propio jueza resaltó en los cuatro autos emitidos el miércoles las dificultades procesales encontradas debido a la tardanza con la que se han interpuesto las denuncias que obran en la causa. En cualquier caso, el joven, que hoy tiene 24 años, "siempre ha confiado en la acción de la justicia" y lo seguirá haciendo.

Además, según indica Europa Press, el abogado reconoció que el segundo denunciante se puso en contacto con él para pedirle también que le representara pero Aguilera declinó esa petición por considera "que no deben mezclarse dos denuncias" y porque no está de acuerdo en que ya haya salido contando su relato en los medios de comunicación, en concreto en 'La otra red' de Cuatro.

Por otro lado, desde el Arzobispado se insistió ayer a este periódico su confianza en la justicia y se aseguró que mientras continúe la investigación judicial y la pontificia sobre el caso se mantendrá el silencio para no interferir en el caso. Preguntados expresamente por el viaje del arzobispo, Francisco Javier Martínez, al Vaticano para entrevistarse con el Papa, aseguraron que no había previsto ningún viaje. De hecho, aseguran que el funcionamiento de la iglesia en Granada sigue su ritmo habitual y que la agenda del prelado se mantiene sin cambios pese a lo sucedido. De hecho, el próximo acto público en la agenda oficial del arzobispo es este sábado 29, a las 19:00 horas, en la Catedral, donde se celebrará una vigilia de oración y una eucaristía para inaugurar el año dedicado a la vida consagrada. El domingo está previsto que oficie la misa de las 12:30, justo una semana después de que se postrara ante el altar mayor para pedir perdón por los "escándalos" que han afectado a la iglesia en alusión directa a las denuncias de pederastia que saltaron a la luz después de que el propio Papa instara a su investigación.

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