JOAN CARLES MARCH. DIRECTOR DE LA ESCUELA ANDALUZA DE SALUD PÚBLICA

"El papel de la Escuela tiene que ser imprescindible en la vida sanitaria"

  • Lleva más de 25 años vinculado a la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) como docente, investigador y consultor Apasionado de las redes sociales, quiere dar más visión al centro

Entró en la Escuela de Salud Pública hace más de 25 años de la mano de su creador, Patxi Catalá, el primer director de la EASP. Una figura que ahora se recupera después de varios años en los que gerentes o consejeros delegados ajenos al centro han marcado los pasos de esta entidad, todo un referente en salud.

-¿Por qué se ha cambiado de estrategia de dirección?

-La Consejería ha apostado porque el futuro de la Escuela es bueno que se base en los profesionales que trabajamos en ella. Desde la primera dirección de Catalá durante 15 años, hasta estos 30, todos han sido personas que han venido de fuera de la institución, personas con alguna dirección general en Sevilla, dirección de hospital o cargo directivo en centro sanitario. Ahora se plantea una apuesta por la Escuela, por los profesionales, basada en la importancia de la participación de los profesionales en la dirección del centro. Y se ha pensado en mí quizás por mi experiencia en la gestión de proyectos y personas y mi conocimiento de la Escuela.

-¿Qué cree que hay que cambiar?

-A nivel interno necesitamos más cohesión, hacer músculo de equipo. Y gestionar más a través de microequipos. La idea es hacer una Escuela más cercana a la ciudadanía, 3.0, que combina el 1.0 de una escuela que forma con una 2.0. Me interesa que estemos abiertos en redes sociales y en la vida ciudadana y profesional también a través de las redes. No es que dejemos de hacer lo 1.0, sino que hagamos las dos cosas.

-Sí, porque hasta ahora el reconocimiento de la Escuela llega por ese trabajo 1.0.

-La apuesta es por una Escuela que sigue siendo internacional, que tiene que ayudar a los servicios sanitarios a dar los mejores servicios, por lo que hay que innovar, ser proactivos, estar pendientes de problemas de salud como ahora la hepatitis o el ébola, y poder ayudar a plantear soluciones. Que los planteamientos de los profesionales de la Escuela estén en ese debate. O si hay que buscar solución, por ejemplo, a las Urgencias, hay profesionales de la Escuela que pueden dar su apoyo. Tenemos que estar muy cercanos a los servicios sanitarios, a los problemas de salud pública y a la ciudadanía

-¿Se contaba poco desde el sistema sanitario con esos dictámenes de la Escuela?

-Siempre hemos tenido un papel pero hay que dar un mayor impulso. Sus informes, su papel, tiene que ser imprescindible en todos los momentos de la vida sanitaria de Andalucía. Y también generar conocimiento para que Andalucía siga siendo línea de futuro, una de las autonomías que más innova en el campo sanitario. Ahora, por ejemplo, si una de las claves es que la opinión del usuario es fundamental para mejorar la atención, la Escuela tiene que estar presente y ayudar a que esa línea pueda consolidarse.

-Hay que acercarse también al profesional sanitario de base, que la ve como algo lejano.

-Sí. A veces se nos ve muy para los directivos, y aunque tenemos que hacerlo, probablemente tenemos que buscar una mayor relación para formar a profesionales en las prioridades del sistema. Ya hemos hecho un avance con la enseñanza virtual, que tenemos que consolidar. La Escuela necesita ese salto donde los profesionales de la Escuela asuman ese reto de creatividad, de ayudar a que el sistema sanitario busque las mejores ideas estén donde estén. Apostar por una sanidad donde la innovación sea seña de identidad. Si en 2014 hemos realizado unas 17.000 horas docentes virtuales, esta tiene que ser una apuesta con mayor profundidad.

-¿Mejoraría el sistema teniendo en cuenta más a la Escuela?

-La Escuela tiene un área de consultoría en la que damos apoyo en la búsqueda de soluciones. Esa solución tiene que estar basada en el conocimiento de las mejores prácticas que hay en Europa o en el mundo y eso lo puede aportar la Escuela. También intentar sacar el mayor conocimiento de los profesionales de los servicios. La participación del profesional es básica en la búsqueda de soluciones. No se puede hacer la mejor de las soluciones sin contar con la gente y nosotros tenemos que ayudar a que eso sea real. La mejor de las soluciones es la que cuenta con las personas. La palabra participación tiene que ser un eje.

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