Los conflictos derivados del alquiler de viviendas y otro tipo de inmuebles son uno de los procesos que más se repiten en los juzgados de la provincia. Juristas y magistrados se afanan en resolver este tipo de casos que se han acrecentado últimamente, pese a que la tendencia nacional es de descenso vertiginoso. El soniquete de la recuperación económica no se refleja en las estadísticas sobre sentencias relativas al arrendamiento, al menos en lo que respecta a Granada donde en el último año se han registrado un total de 138 demandas, 27 más que en el curso anterior que representan una subida destacable del 24%.

Son los datos que se extraen del informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre las estadísticas de arrendamientos urbanos en 2014. Este estudio revela que el impago sigue siendo la causa principal de los problemas entre los propietarios y los inquilinos de los inmuebles. En total de las 138 sentencias que se juzgaron en la provincia, 124 (90%) representaron un desacuerdo por la falta de pago de la renta o de las cantidades presupuestadas, incluidas las fianzas.

En menor proporción, pero los juzgados también asisten a lo largo del año a una causa habitual que enfrenta a caseros y ocupantes de los inmuebles como son las sentencias por la realización de actividades molestas, insalubres o peligrosas. En Granada se dieron cinco demandas de esta índole (todas en viviendas), ocho menos que en 2013. Por otra parte, los litigios por otro tipo de motivos no tipificados han subido, pasando de uno a los ocho del último informe, la mayoría de ellos originados en el arrendamiento de locales.

En cualquier caso, se trata de sentencias aisladas, ya que la economía es el principal indicador de los laudos sobre alquiler. Un hecho que se demuestra en que según el informe encargado por la empresa Alquiler Seguro al Fichero de Inquilinos Morosos (FIM), el índice de morosidad en los arrendamientos urbanos de Granada se ha triplicado en los últimos siete años, justo cuando empezó la crisis. Este estudio indica que el índice de impagos en los alquileres de zonas urbanas en Granada es de 448,7, tres veces más que en 2007, cuando apenas se sobrepasaba la cifra de 150,0. Asimismo, destaca en dicho informe que el importe medio de los impagos de los inquilinos morosos supere la cantidad de los 5.398 euros.

Pero el impago casi siempre se traduce en multa judicial. Así lo demuestran los datos del INE, según los cuales los arrendadores casi siempre llevan la razón. De las 138 sentencias de este último año, los jueces dieron la razón al denunciante en 104 ocasiones y estimaron la demanda parcialmente en 23 de los supuestos. Tan sólo diez de los litigios fueron desestimados en los tribunales.