Ni en la UCI ni tampoco en planta. El diagnóstico del catedrático Economía Aplicada de la Universidad de Granada Miguel González es que la economía granadina ya tiene el 'alta médica' cuatro años después de su momento más crítico, aunque las secuelas de la crisis son evidentes. "El enfermo tiene muchas heridas y abiertas", advirtió el experto de la UGR sobre las prescripciones a tener en cuenta para no recaer en la depresión financiera. González, que ha dirigido el Boletín número 41 de Coyuntura Económica de la Caja Rural de Granada, recordó que "en 2011 la recesión llevó a una situación muy grave del mercado de trabajo", algo que se ha transformado en crecimiento durante el último ejercicio en el que la actividad económica se expandirá un 3,2% según las previsiones de los Analistas Económicos de Andalucía.

Granada igualaría así a Sevilla y solamente se quedaría por detrás de Málaga (3,3%). Por ahora, la tasa interanual habla de un incremento real en la provincia del 2,8% en consonancia con los de España y Andalucía. De esta manera, el informe de Caja Rural pone de manifiesto que la economía granadina está experimentando un comportamiento positivo en comparación con los años más duros de la crisis. El desarrollo lo están auspiciando los repuntes de los sectores de los servicios y la construcción que están ayudando a aumentar el consumo de las familias y las administraciones. También reflejan un buen comportamiento la agricultura y la industria, aunque el catedrático de la UGR apuntó que "el peso de la industria en la provincia es menor que a nivel regional y nacional".

Esta mejoría se ha traducido en una reducción del desempleo del 5,5% respecto al año pasado, puesto que la tasa de paro se ha reducido del 36,31% al 31,12% con la incorporación al mercado laboral de 22.000 granadinos. No obstante, el estudio de Caja Rural hace una puntualización en este apartado y pone el foco negativo sobre que el empleo que se está creando en España no es bueno, donde el precariado y los contratos a tiempo parcial están a la orden del día. Además del desempleo de larga duración la elevada tasa de paro juvenil en España próxima al 50%, son algunas de las "heridas" a las que se refirió el catedrático de Economía Aplicada en su exposición.

Por tanto, la conclusión que se hace en el boletín es que por sus características productivas, muy inclinadas a los servicios tradicionales y, especialmente, al turismo, la economía granadina se ha podido subir al tren de la recuperación junto al mercado internacional y nacional. Esto no exime a Granada de tener que apostar por "crear una actividad económica con más empresas y reducir ese componente estructural", pues según González tanto los servicios como la construcción "tienen un recorrido limitado". En este sentido, el experto en Economía Aplicada se refirió a la recién terminada Autovía del Mediterráneo como la forma de que la sociedad granadina adopte una actitud activa.

"Hemos entroncado con el arco Mediterráneo y hay que utilizar esta infraestructura como palanca de cambio, aprovechar los factores de desarrollo y creación de empresas como han hecho otras regiones españolas y europeas", subrayó González. En todo caso, el catedrático precisó que la actividad económica debe acordarse en todo momento de que "la crisis no es una cosa del pasado" y de que la "mejoría no es generalizada" y todavía hay mucha gente pasándolo mal.