Si a la crisis económica se suma la escarpada cuesta de septiembre y los gastos de la vuelta a colegio el resultado de la ecuación es la ruina. Aunque en la mayoría de los casos lo que quiebra es sólo la moral de muchos padres de familia que se ven con el agua al cuello justo cuando acaban de dejar la playa, la situación puede llegar a ser muy angustiosa. Por todo ello, la meta de muchos hogares granadinos es que los niños lleguen el primer día de clase con todo el equipo necesario al mínimo coste posible. Por eso, la jornada de compras de material escolar, libros de texto y uniformes arrancó ayer, el primer día de septiembre, de una forma bastante tibia.

Pese al tímido inicio, los comerciantes prevén que las ventas aumenten conforme avance la presente temporada. Todavía falta una quincena para la apertura de los colegios, pero muchas grandes superficies, librerías y tiendas especializadas iniciaron la semana pasada la campaña dedicada al nuevo curso escolar.

El encargado de la tienda de uniformes granadina Emilio Carreño, Fancisco García Porcel, que lleva más de 40 años dedicada a este negocio, asegura que las ventas en agosto han sido "más ventajosas que las de 2007". Sin embargo, el día 1 de septiembre le resultó ayer "decepcionante", aunque esperaba que no fuese la tónica de las próximas semanas.

El desembolso medio por alumno oscila entre los 100 euros de los estudiantes de un centro público, o incluso menos, y los más de 1.000 euros que pueden llegar a desembolsar los estudiantes de un colegio privado.

En centros como Monaita, Mulhacén o Lux Mundi, la mensualidad de los cursos más pequeños ronda los 200 euros, pero en los cursos superiores de Bachillerato puede llegar a costar más de 400, a lo que hay que sumar los gastos de autobús, comedor, actividades extraescolares, uniformes y material. "La mensualidad de los más pequeños es de 232 euros, y la de los mayores, de 420", detalla el director del colegio masculino Mulhacén, Fernando Ruiz, quien especifica que el coste del autobús asciende a 100 euros y el del comedor a 110.

A esto se añaden las actividades extraescolares, que pueden oscilar entre los 30 y los 50 euros mensuales, y de las que el colegio ofrece una amplísima gama. Hay clases de idiomas: inglés, alemán, francés y chino. También deportes, como fútbol, balonmano, kárate, yudo o tenis de mesa. Además, hay artísticas, como piano, guitarra, coro o pintura al óleo.

Dependiendo de si el niño da clases de coro o de pintura al óleo, la diferencia de gastos en material escolar puede ser muy notable.

También varía el precio de los uniformes y el gasto que los padres hacen en ellos. En este sentido, Francisco García Porcel explica que durante el mes de agosto hay padres de los colegios más caros que han hecho compras para el uniforme de su hijo superiores a los 500 o 600 euros. Sin embargo, también hay muchos, que son los que espera en estas fechas, que se gastan unos 40 o 50 euros en un "recambio" de ciertas piezas del uniforme.

La crisis está provocando que los padres miren con lupa los precios e intenten aprovechar al máximo el material escolar de cursos anteriores. Aunque Emilio Carreño lleva cinco años sin subir los precios de los uniformes, si lo normal era comprar dos prendas por alumno (jerseys o polos) este año sólo se adquiere una. El precio depende del colegio, pero lo normal es que la cuantía de todos los de los concertados sea la misma, según cuenta García Porcel, porque aunque tengan distintos colores y diseños el material es el mismo. Aunque el precio de algunos centros, de los que prefiere no especificar ningún nombre, es superior.

Un capítulo aparte lo constituyen los libros de texto, porque son bienes imprescindibles y no se puede escatimar: hay que comprar los que el colegio manda en la lista, ni uno más ni uno menos. El coste se ha reducido gracias al programa de gratuidad de libros de textos puesto en marcha por la Junta de Andalucía. A pesar de ello, los libros de Infantil y Bachillerato, dos etapas que se encuentran fuera de la educación obligatoria, no cuentan con esa subvención.

Además, cuadernos, publicaciones anexas, bolígrafos y mochilas contribuyen a que el desembolso de los padres sea de entre 30 y 50 euros por alumno. Pero en el coste del material escolar sigue siendo fundamental el tipo de colegio en el que se matricula un alumno, y sobre todo el número y tipo de actividades extraescolares.

Esos son los cálculos de Rafael Serrano, encargado de la Librería Babel, para quien esa cantidad es insignificante si se tiene en cuenta el precio de un lote de libros de texto de los alumnos de Bachillerato, que según el centro y las editoriales que elija puede variar de los 240 a los 280 euros.

En los libros de Infantil se han incrementado los precios considerablemente. En este sentido, los libros de texto de estos cursos han pasado de tener un coste medio en 2007 de 50 euros a unos 80 este año, un encarecimiento del que no pasa desapercibido para los bolsillos.

Pese a ese aumento, el carécter fijo de las listas de libros de texto y la gratuidad, el presidente de la delegación granadina de la Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía (FACUA), Javier Cejuela, recomienda contrastar los precios en distintos establecimientos, comparar productos sin marcas -o de marcas blancas-, y evitar las aglomeraciones de última hora. De todas formas, si hay que hacer ese desembolso, mejor quitárselo de encima cuanto antes.