Granada

El Metro moverá más de 13 millones de viajeros y el billete costará 0,89 euros

  • Fomento garantiza que la infraestructura comenzará a funcionar en el último cuatrimestre del año y que será uno de los sistemas de transporte metropolitanos "más rentables" de toda España

El Metro de Granada va a ser uno de los más rentables de España cuando entre en funcionamiento después del verano. Las dudas sobre su viabilidad las despejó ayer el consejero de Fomento, Felipe López, que desveló en su comparecencia en el Parlamento andaluz los datos de explotación y puesta en funcionamiento de la infraestructura. Una de las cifras del Metro más esperadas era saber cuánto costará el viaje, aspecto clave para definir su rentabilidad y uso por parte de la ciudadanía en comparación con el resto del transporte público. El precio medio por viajero se ha fijado en 0,89 euros, aunque después se definirá una tabla de precios con "oscilaciones muy pequeñas" que vendrá determinada por el tipo de billete, si es sencillo (será el más caro) o se sacan abonos o tarjetas monedero multiviaje, que reducirán el importe del billete al igual que ocurre, por ejemplo, en los autobuses. De hecho, el precio estará promediado con el del transporte metropolitano, el urbano o la LAC.

Esto será lo que pagarán los más de 13 millones de viajeros que se espera que utilicen el Metro cuando se ponga en marcha para el último cuatrimestre del año. Los cálculos de desplazamientos para el primer año de funcionamiento serán de más de 11 millones de viajes, más de 12 en el segundo año y más de 13 el tercer año. Así, los ingresos directos por viajes ascenderían al año a unos 11,6 millones de euros.

Datos que garantizan, según el consejero, su rentabilidad. Así, con los ingresos se cubrirán más del 80% de los gastos de funcionamiento del Metro, quedando, según los cálculos de Fomento, un déficit de explotación de 1 o 1,5 millones de euros -que deberían asumir la Junta y los cuatro ayuntamientos afectados-, una cifra muy baja para un sistema de transporte público y totalmente asumible.

Además, el pago de los créditos concedidos a la Junta para el pago de las obras no se cargará a la cuenta de resultados de Metro de Granada, sino que correrá a cargo de la Junta de Andalucía, por lo que la sociedad sólo afrontará los gastos de trabajadores, consumo o mantenimiento, los propios de su actividad, lo que redunda también en su rentabilidad económica. De hecho, el consejero de Fomento aseguró ayer en su comparecencia parlamentaria que el de Granada será "uno de los sistemas metropolitanos más rentables y mejor ajustados de cuanto funcionan en España".

Fomento anunció también que la gestión será totalmente pública y correrá a cargo de la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía. Lo único que se sacará a licitación será la contratación del personal de operación (un centenar de trabajadores entre director de operaciones, coordinador de mantenimiento, supervisores, interventores y conductores), que dependerá de una sociedad operadora. Pero la gestión y explotación será pública, algo de lo que se ha dudado, según López, quien dijo que "ha formado parte de algunas dudas trasladadas en ocasiones desde una posición interesada de generar equívocos".

Según el consejero, se han hecho análisis de las diferentes opciones según presupuesto y eficiencia y finalmente la gestión pública directa "era la manera más eficaz y responsable para hacer una adecuada explotación". Así, la Agencia de Obra Pública (que tutela los metros de Sevilla y Málaga mediante una gestión concesional) dirigirá la explotación del Metro pero con la dotación del personal de la línea por parte del operador, lo que "permite adecuarnos a los criterios de racionalización del sector público, preservando en todo momento la titularidad 100% pública del ferrocarril metropolitano de Granada", insistió López.

Además de estos cien puestos de trabajo directos habrá otro centenar de empleos que también se contemplan de forma indirecta en la puesta en explotación del sistema, como son los de vigilancia o limpieza.

Finalmente se descartó la participación privada en la sociedad Metro de Granada ya que habría que darle retorno a su inversión y encarecería el servicio. Además, el aporte presupuestario necesario llegó con los créditos del BEI y la Banca Comercial (345 millones de euros), con lo que se consiguió la inversión prescindiendo de la fórmula mixta ya en 2012. Después se analizaron otras fórmulas con la llegada de IU a la Consejería de Fomento, como contar con una dotación exclusiva de personal público a través de ofertas de empleo. Esto se vio también que era inviable por las exigencias de cumplimiento de déficit y los límites en la tasa de reposición, así que finalmente se ha decidido que la dirección sea de la Agencia pero dotando el personal por licitación con una sociedad operadora que organice la estructura.

"Estamos convencidos de que todos los esfuerzos económicos, de gestión y de racionalización de la explotación van a resolver un problema de movilidad. Si no fuese por la puesta en marcha del Metro, estaríamos ante un problema más serio y grave", dijo el consejero. De hecho, con el Metro se dará solución a gran parte de la movilidad de Granada. Según López, la ciudad absorbe 400.000 movimientos diarios de entrada y salida, tanto de transporte público como privado. En el horizonte 2020 se llegará al medio millón de desplazamientos. Y el Metropolitano se ofrece como alternativa para gran parte de estos con la conexión de Granada con Albolote, Maracena y Armilla.

El consejero aclaró que comparecía para aclarar algunas opiniones sobre el Metro "carentes de sentido" y destacó que el proyecto ha sido "en origen, aunque luego lo veremos," el resultado de un acuerdo entre instituciones, entre Junta y ayuntamientos, a los que dijo, sobre todo por las críticas del PP, que municipios "que estaban en el origen de la propuesta no pueden acabar siendo un elemento crítico", porque "no han sido soluciones impuestas, sino pactadas con los ayuntamientos de Maracena, Albolote, Armilla y Granada".

El titular de Fomento justificó ayer también el sobrecoste y los retrasos en la obra, con 15,6 kilómetros de recorrido. "Ha tenido algunas modificaciones de presupuesto y en tiempo como consecuencia de demandas, algunas imposibles de prever como las referentes al patrimonio histórico". Unos retrasos que "no han sido por una mala gestión", según el consejero.

En la actualidad se está trabajando en el único subtramo pendiente, que es el del paso por la estación de Avenida de Andaluces y su aparcamiento en superficie, en lo que será la zona de conexión con el AVE y la nueva estación. El objetivo es que esté terminado en el mes de mayo. En agosto terminarán los últimos trabajos de implantación de sistemas de energía, comunicación y señalizaciones, lo que permitirá en septiembre ampliar las pruebas dinámicas del trazado completo, desde Albolote hasta Armilla.

Además, el consejero anunció ayer que las obras compensatorias en los municipios de Armilla y Maracena, licitadas en diciembre pasado, se adjudicarán en breve, trabajos que comprenden la reurbanización de ejes viarios paralelos al trazado del Metro.

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