Cada semana aumenta la actividad en el hospital del PTS. La mudanza al centro sanitario más grande de Andalucía se lleva a cabo paso a paso. Y cada nuevo paciente, nuevo servicio y nuevo tratamiento, se convierte en un hito importante para el inicio de la vida de este hospital. Uno de estos capítulos que se recordará es el inicio del tratamiento a pacientes con cáncer en el nuevo recinto hospitalario. Y tendrá una fecha: marzo de 2016. El pasado jueves se dio el alta al primer paciente oncológico tratado íntegramente con radioterapia en el nuevo hospital, donde ya ven a pacientes con cáncer de próstata, mama, recto, vesícula seminal y ganglios linfáticos.

Para esto está ya habilitada el área de radioterapia oncológica con toda la tecnología necesaria, de última generación, que permite la mayor precisión posible en los tratamientos. El tratamiento se realiza con un acelerador lineal que está apoyado por un TAC que permite realizar imágenes 4D del paciente y también en movimiento. En ese TAC es donde se realiza la primera prueba al paciente para ver dónde está el tumor y qué hay alrededor para que la precisión sea la máxima. Un TAC que se ha coordinado también con el equipo del Virgen de las Nieves por si hay algún fallo de las máquinas poder trasladar al paciente al otro hospital. Algo que parece obvio pero que hasta ahora no se podía hacer. Una vez realizado ese TAC el facultativo "dibuja" en el sistema de planificación la zona que se quiere tratar y lo envían después a los radiofísicos (que están en el hospital desde el pasado verano), que son los que calculan la dosis (dosimetría) necesaria para tratar el tamaño y volumen del tumor señalado.

"El físico recibe la imagen del TAC dibujada por el médico y le dan la dosis y ponen el plan de tratamiento", explica el responsable de la unidad, José Expósito.

Después se reproduce el tratamiento en el acelerador lineal. Para eso hay que colocar al paciente bien para atacar al mismo sitio que se ha señalado. "La principal virtud de este sistema es que tiene un sistema de imagen incorporado para comprobar que donde estamos apuntando es donde queremos realmente actuar. Y se adapta a las formas para proteger el órgano sano", explicó el facultativo. Es radioterapia guiada por imagen, una novedad en Granada.

El martes trataron en el hospital del PTS a la primera paciente con radioterapia de intensidad modulada, "que usa en lugar de campos grandes con dosis fija, campos pequeños con dosis adecuada", ideal para volúmenes irregulares. Es la primera vez que se hace en Granada, que todavía no lo aplicaba. Y esta semana han comenzado. "La ventaja es conseguir más alta dosis a volúmenes cada vez más irregulares. Porque los volúmenes de los tumores pueden tener formas complejas y se puede adaptar el tratamiento respetando los órganos críticos que hay alrededor. Eso permite también reducir las sesiones concentrando las dosis. Y todo con garantías de seguridad, radioprotección, ...". Y la ventaja del nuevo acelerador es que a la vez que se da el tratamiento se hace una imagen para ver exactamente el volumen que se va a tratar. "Se superpone la imagen que se ha hecho en el TAC con la que se toma en el acelerador, que tiene que coincidir milimétricamente. Más de 2 mm no te deja", aclaró Expósito.

El estándar es tratar 25 paciente por turno, de 08:00 a 15:00 de la tarde. Con el turno de tarde se tratarán 50 pacientes al día. El tratamiento dura entre 5 o 10 minutos.

Para que no haya lista de espera, Granada necesitan cuatro unidades, que es lo que hay desde hace un mes con el nuevo aparato del hospital del PTS. "Tenemos que hacerlo bien para que cuando cerremos San Cecilio mientras se acopla la otra máquina -que se trasladará desde el Clínico al PTS para reutilizarla- aquí tratemos al máximo número de pacientes". Para eso se está haciendo todo lo posible en tenerlo todo rodado y preparado. "Y los pacientes están colaborando mucho".

Ya se han hecho 15 TAC, que son los pacientes que están en tratamiento. Para la semana que entra se sumarán hasta los 25 para completar el turno de mañana.

Para que todo además funcione rodado, se han tenido en cuenta otros aspectos como la recepción del paciente y su movimiento en la unidad. "El paciente recibirá una pulsera con un lector que pasará por una máquina al llegar para que se sepa que están ya aquí. Además la máquina preparará al leer estos datos su sistema personalizado, y no el de otro paciente. Todo está perfecto pero los primeros días tiene que revisarse todo bien para que funcione", asegura Expósito.

Tienen cinco consultas incluyendo la supervisión de Enfermería. Ahora para los pacientes que tratan funciona una consulta médica y otra de enfermería pero se irán sumando más hasta completar las cinco. Además hay zona de trabajo, de sesiones clínicas, vestuarios para pacientes, sala de espera...

La braquiterapia será lo último que trasladen. "Lo trasladaremos cuando esté equipado al completo y funcione la UCI. El interés era empezar la actividad de tratamiento en el nuevo acelerador porque lo que interesa es que la situación de trabajar en tres centros dure lo menos posible. En el momento en que esté con turno completo, la semana que viene, empezaremos a llenar el turno de tarde y cerraremos el del Clínico. Al final de verano estarán ya aquí los dos aceleradores lineales Cuando esté instalado se trasladará entonces la braquiterapia, que necesita más infraestructura".