El desbloqueo de las obras del AVE a su paso por Loja sigue dando pasos hacia adelante para que el tren de alta velocidad llegue a Granada cuanto antes. Si ayer este periódico pudo saber que Adif mandó esta semana una propuesta a la Unión Temporal de Empresas (UTE) adjudicataria, ahora la 'pelota' está en el tejado de esta.

Según fuentes del organismo dependiente de Fomento, Dragados y Tecsa (las sociedades mercantiles que conforman la UTE) están barajando la oferta de Adif para poder reconducir el 'impasse' de las obras de la Alta Velocidad que sufre Granada desde hace casi 17 meses.

Las discrepancias entre las empresas y Adif surgieron hace más de una semana cuando la UTE solicitó formalmente al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) la rescisión del contrato.

La situación afecta a las obras de acondicionamiento de 27 kilómetros de la línea de ancho convencional Bobadilla-Granada para adaptarla al paso de trenes Alta Velocidad. Estos trabajos están "paralizados" como consecuencia de un modificado y un complementario, de "difícil encaje legal" que la UTE adjudicataria, del Grupo ACS, solicitó al Ministerio de Fomento, ya que implican un incremento presupuestario que supera el 10% del coste de la obra, establecido como límite en la normativa sobre contratos públicos.

Adif adjudicó las obras para la llegada del AVE a Granada por 23,8 millones de euros, la mitad de los 48 millones por los que se licitó en un primer momento. Una decisión siempre arriesgada que ahora deja ver sus consecuencias.

Durante los últimos días se ha estado elucubrando con una posible reunión de las partes que no ha llegado a materializarse. Desde Adif consideran que han realizado su trabajo, dejando toda la presión sobre las empresas concesionarias, de las que el Administrador Ferroviario espera una respuesta en los próximos días.

Granada arrastra más de 500 días sin conexiones ferroviarias, a excepción del tren de media distancia que llega desde Almería. Esta situación ha conseguido algo que parecía imposible años atrás: poner de acuerdo a todas las fuerzas políticas con representación en el Ayuntamiento.

Mientras otras obras relativas al AVE (como el Corredor Mediterráneo o la llegada del tren de alta velocidad a Galicia) eran incluidas en el pacto firmado por el Partido Popular y Ciudadanos, las de Granada no se citaban en ningún momento, algo que levantó la crispación entre los políticos de la capital.

En esta línea, la plataforma 'AVE Sí, Pero No Así', admitió su "preocupación" por el hecho de que la restricción del tráfico ferroviario "no tenga peso" en los acuerdos a nivel nacional y exigió una vez más la restitución de los tramos ferroviarios alternos al AVE con el fin de no seguir aislado "ni un sólo día más".