Cuando Granada está a escasos dos días de cumplir 17 meses sin conexiones ferroviarias, la solución a la inactividad de las obras del tramo del AVE en Loja se espera como agua de mayo. La oferta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), empresa pública dependiente del Ministerio de Fomento, que le ha hecho llegar a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Dragados y Tecsa, se ha convertido en la última esperanza para que los trabajos vuelvan a reanudarse en los 27 kilómetros en los que restan por instalar el tercer carril para permitir el paso del tren de altas prestaciones por la vía convencional.

Todos los focos están centrados en la respuesta que las adjudicatarias puedan dar a Adif. En caso de llegar a acuerdo, la solución para el reinicio de los trabajos sería mucho más fácil que si las empresas mantienen su postura de abandonar el proyecto. Una escenario que podría alargar sine die la llegada del AVE a Granada.

Mientras que trascienden las negociaciones entre Adif y la UTE, los sectores sociales de la provincia siguen con la intención de salir a la calle el próximo 17 de septiembre para reclamar la conexión ferroviaria y, por ende, la puesta en marcha del AVE. La fecha planteada por el colectivo 'Granada en Marcha' va sumando apoyos. La semana pasada el presidente de la Diputación, José Entrena (PSOE), ya anunció su intención de asistir al acto reivindicativo en caso de que la institución provincial sea invitada formalmente. Por otro lado, la agrupación de los socialistas de la capital ya han confirmado su presencia en la protesta. Además, el alcalde de Granada, Paco Cuenca, en reiteradas ocasiones ha reclamado movilización social.