Granada

El PSOE granadino, entre la reflexión profunda y el asalto antidemocrático

  • La crisis que sufre el partido a nivel nacional acentúa las diferentes posiciones de la militancia

No corren buenos tiempos para el PSOE. La maniobra de presión sobre Pedro Sánchez a cargo de su sector crítico ha escenificado el desencuentro manifiesto entre las dos facciones que hay en el seno del partido: los defensores de Sánchez contra los partidarios de Susana Díaz. A ese escenario tan complejo a nivel interno no es ajeno el PSOE de Granada.

Sin ir más lejos, la secretaria general de los socialistas granadinos, Teresa Jiménez, que participó ayer junto al resto de representantes de la delegación granadina en el Comité Director convocado por Susana Díaz como secretaria general del PSOE andaluz, catalogó la situación de "confusión y conflicto. En declaraciones a Granada Hoy, la dirigente socialista fue ayer muy crítica y apuntó que la solución al problema "no es un congreso exprés". Así abogó por "poner el partido en manos de una comisión independiente" una vez que han quedado vacantes 17 plazas de la Ejecutiva Federal. En ese sentido, incidió en que Sánchez "no tiene legitimidad" para liderar al PSOE.

Ante la intención de convocar un Congreso Federal que defiende Sánchez, la dirigente provincial indicó que "no podemos anticipar un debate que precisa de reflexión profunda para fijar hacia dónde tenemos que ir y qué queremos".

En la misma línea se pronunció la granadina María José Sánchez, hasta anteayer secretaria de Sanidad en la Ejecutiva Federal. La también consejera de Igualdad explicó ayer que se ha marchado "entre otras cosas" porque le han dicho que estar en desacuerdo "es estar de acuerdo con Rajoy y ser de derechas", algo que ella considera "un insulto". Sánchez defendió que presentó su dimisión "a título individual, personal, como miembro de la Ejecutiva que tengo derecho a irme cuando no estoy de acuerdo".

Por su parte, el ex portavoz de la corriente interna del PSOE Izquierda Socialista José Antonio Pérez Tapias, que compitió por la Secretaría General del PSOE a Pedro Sánchez y a Eduardo Madina, considera que el movimiento de una parte del partido para intentar hacer dimitir a la Ejecutiva es "una especie de rebelión antidemocrática" y "no es el mejor camino para afrontar la crisis". Pérez Tapias consideró que la dimisión en bloque responde a un intento de impedir la posibilidad de que Sánchez trate de alcanzar un pacto de gobierno con Podemos y con los independentistas, que era la opción defendida por el propio Pérez Tapias.

A su modo de ver, esta situación se podría haber resuelto con una consulta a la militancia "sobre un pacto posible" igual que cuando los socialistas pactaron con Ciudadanos para la investidura fallida de Sánchez. Tras las salidas de anteayer, Tapias afirmó que "la situación ya ha llegado hasta el límite".

Desde el PSOE de la capital, el alcalde Paco Cuenca pidió ayer a los órganos de dirección de su partido que actúen "lo antes posible" y "con lealtad no solo a unas ideas y a unos valores, sino con lealtad a este país y a esta ciudad". También el secretario general del PSOE de la capital, José María Rueda, llamó a la "calma" y la "tranquilidad" a fin de que los órganos del partido actúen con "sensatez y lealtad" así como que el debate de "fondo" -político y estratégico- sea "leal y democrático".

Por otro lado, el alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez Salas, está recabando apoyos desde Andalucía a Pedro Sánchez porque "no estamos de acuerdo muchísima gente" con el sector crítico. El regidor junero apuntó ayer que ya advirtió a Sánchez que Susana Díaz "le podía traicionar" y sin embargo él "pecó metiendo a toda la gente que dijo" la secretaria general del PSOE-A en los órganos de dirección "para hacer esto que está haciendo ahora mismo".

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