Granada

El Milenio de Granada empieza hoy

  • El Consejo de Gobierno de la Junta debate en la ciudad las primeras propuestas para celebrar la efeméride

El Ejecutivo autonómico abandona su escenario habitual para los consejos de Gobierno, Sevilla, y lo sitúa en el edificio Macroscopio del Parque de las Ciencias de Granada. Es una decisión que tiene mucho de simbólica y que trata de exteriorizar el apoyo de la Junta de Andalucía al Milenio del Reino de Granada, efeméride que se celebrará en el año 2013 y que va a ser, previsiblemente, el asunto estelar de la reunión de hoy.

El Consejo estará presidido por Manuel Chaves, la primera persona que habló de la necesidad de conmemorar los mil años de la creación de un reino musulmán que en su momento abarcó no sólo Granada, sino las actuales provincias de Almería y Málaga y, en parte, también las de Córdoba, Jaén y Cádiz. Lo hizo el 26 de octubre de 2007 y desde entonces del Milenio se ha hablado mucho desde todas las posiciones imaginables.

Pero si no hay proyectos, ni propuestas concretas, ni plazos para ejecutarlas ni dinero para costearlas, hablar del Milenio, como diría un castizo, es pa na. Y hoy se pueden y se deben empezar a concretar las cosas.

Por ejemplo, su ámbito de actuación. El Milenio, según ha adelantado la Junta, se centrará en Granada porque para eso fue la capital del reino nazarí y la última plaza en ser conquistada por los Reyes Católicos. Pero no se circunscribirá exclusivamente a la ciudad, sino que se abrirá al resto de la provincia y a las ya mencionadas, de ahí que en el consorcio que va a gestionar todo lo relacionado con la celebración vayan a incluirse ayuntamientos y diputaciones de fuera de Granada.

Aunque más importante que el dónde es el qué. Es de suponer que hoy ya se pondrán encima de la mesa proyectos concretos, algunos de los cuales ya se han adelantado desde las filas del PSOE -que, por razones obvias, tienen más posibilidades de salir adelante que los que plantee el PP, en la oposición- y que son, por ejemplo, la creación de un parque metropolitano en la Vega Sur, en los términos municipales de Granada, Ogíjares y La Zubia, o albergar los Juegos Universitarios de invierno de 2015, una suerte de plan b que se fraguó sobre la marcha a la vista de que la organización de los de verano tenía competidores de altura y se antojaba casi imposible.

Pese a que el consenso entre las fuerzas políticas no ha sido desde luego lo habitual en estos trece meses que se lleva mencionando el Milenio, en algunas cosas sí que se ha alcanzado. En la Universiada hay acuerdo, y también en que ese año Granada sea la capital mundial de la Poesía, que se aproveche para reformar barrios antiguos, como el Sacromonte o el Albaicín, y no tan antiguos pero igualmente necesitados, como la Zona Norte. Organizar la Bienal de Flamenco y Música Andalusí y apostar con firmeza para que la Unesco declare el casco histórico Patrimonio de la Humanidad son otras de las actuaciones que gozan de un respaldo casi total.

Pero desde las filas de la oposición, fundamentalmente, se reclama bastante más. Obras emblemáticas, como se las suele denominar y que conviertan el Milenio en un evento inolvidable. "Debe significar para Granada lo que le Expo fue para Sevilla o los Juegos Olímpicos para Barcelona", afirmó su presidente regional, Javier Arenas, cuyo partido, en su día, redactó una especie de carta a los Reyes Magos en la que, para el año 2013, pedía casi de todo: los Juegos del Mediterráneo de 2016, el teleférico a Sierra Nevada -rechazado oficialmente por la Consejería de Obras Públicas-, escaleras mecánicas a la Alhambra y un museo para la ciudad que, puede que a sabiendas de que a ese edificio se le iba a dar otros fines, quería ubicar en el antiguo Banco de España.

Todo será cuestión de dinero, y de eso debe hablarse hoy también. Chaves dijo en su día que entiende el Milenio como un medio "para aglutinar inversión pública y servir de trampolín para el desarrollo económico de Granada", pero el único presupuesto con que se cuenta hasta ahora son 200.000 testimoniales euros para los primeros gastos de funcionamiento del consorcio ya mentado.

Sí se refirió, en cambio, a obras ya en marcha como el AVE o el Metro, que según las previsiones estarán listas en ese año. Pero son partidas ya comprometidas y relacionarlas con la efeméride no parece oportuno. La Junta debe enseñar cuanto antes los ases que guarda bajo la manga. Si es que tiene alguno, claro.

En cualquier caso, a partir de hoy, cuando hablemos de Milenio, lo haremos de algo más concreto. Para discutir, seguro.

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