A estas alturas de la película, sería incomprensible que las mujeres apenas aparezcan liderando las listas de las candidaturas en los diferentes municipios. No obstante, la realidad no se aleja demasiado. Un ejemplo de ello lo encontramos en la comarca de la Alpujarra, donde PSOE y PP sólo tienen el 30% de sus candidaturas lideradas por mujeres -9 de 27 municipios cada partido-. Mientras, de las cinco localidades alpujarreñas donde ha presentado IU sus listados, en tan sólo una figura una mujer como número uno -Almegíjar-. Y en el resto de partidos -Ganemos, PA, Ciudadanos, independientes...- no aparece ninguna mujer alcaldable.

Esto puede llevar a la pregunta de si, aun hoy, el hecho de ser mujer puede ser un condicionante para estar o no al frente de una candidatura. Una de las excepciones la encontramos en Pampaneira, donde su alcaldesa, Rafaela Rodríguez, fue la que en las municipales de 2011 más porcentaje de apoyo obtuvo de sus vecinos (85,82%) en comparación con todos los candidatos y candidatas de la provincia. Motivo suficiente como para que 'Rafi', como se la conoce en este pueblo enclavado en el Barranco de Poqueira, quiera seguir siendo la que lleve las riendas del municipio, aunque para ello tenga que ser cambiando de color político. En 2011 fue por el PSOE y el próximo 24 de mayo lo hará por el PP.

En declaraciones a Granada Hoy, Rafaela señala que el principal motivo de este cambio ha sido el "no haber contado conmigo para las listas", en alusión al PSOE. La alcaldesa pampanurria lo tiene claro: "Sigo siendo la misma, quiero seguir trabajando por mi pueblo y mi objetivo es Pampaneira, sea con las siglas que sea." Además, asegura que "he estado atada de pies y manos durante 4 años, y yo quiero que me den la oportunidad de trabajar a mí y de que la gente conozca como soy. Estamos en democracia y cada uno va donde quiera y con las siglas que quiera" sentencia la primera edil.

Durante la legislatura actual, el Ayuntamiento de Pampaneira cuenta con seis concejales pertenecientes al PSOE, frente a uno del PP, un panorama que podría cambiar sobremanera de cumplirse efectivamente aquello de que se votan a las personas.

Que sea mujer no ha sido obstáculo para Rafaela Rodríguez en su carrera política: "Es más, quizá por el hecho de ser mujer inspiramos más confianza y cercanía entre los vecinos, porque, por lo general, las mujeres somos más comprensibles". Y entre ordenanza y ordenanza, hasta ha sido madre. "La experiencia ha sido muy bonita, lo que ocurre es que yo he tenido que compaginarlo con mis tareas en la Alcaldía. Incluso, tuve que llevar la cuna al despacho durante dos meses hasta que mi hijo dejó el pecho. Si tocaba reunión y a la vez pecho, perfectamente compatible, allá que iba yo con mi niño en el pecho", cuenta con una sonrisa.

Rodríguez tiene clara la explicación al bajo número de mujeres en las listas: "Aquí hay pocas que quieran comprometerse políticamente, por el tema de la maternidad. No tenemos guarderías, y si tenemos hijos no tenemos donde dejarlos, siempre tienes que andar pidiendo un favor al vecinos o a algún familiar". Ella es el ejemplo de que se pueden compatibiliazar ambas cosas.