Las elecciones municipales han dejado claro que el bipartidismo no pasa por su mejor momento. A nivel provincial, ni PSOE ni PP llegan siquiera a la mitad de los votos emitidos. Los socialistas con un 35,08% de los sufragios vuelven a confirmar la supremacía en el cómputo general de los 170 municipios, una tendencia que se veía venir visto lo visto en los comicios europeos del año pasado y en las autonómicas del mes de marzo. A menos de cinco puntos se encuentran los 'populares' (31,06%).

Con ese panorama se hace más que vital el papel de IU, que mantiene sus dos diputados, y de Ciudadanos y Vamos que logran dos y uno representantes, respectivamente. Los dos grandes empataron a once por lo que los minoritarios tendrán que adoptar el papel de bisagra. A priori, más fácil lo tiene el PSOE que podría recurrir a IU y Vamos para formar gobierno. Los tres sumarían los 14 diputados que otorgan la mayoría absoluta que pierde el 'popular' Sebastián Pérez después de cuatro años de mandato -el primero para el PP en la Diputación en la historia de la democracia-.

De este modo, un hipotético tripartito dejarían sin opciones a la dualidad que podrían formar PP y Ciudadanos que sumarían 13 representantes, uno por debajo de lo necesario.

Como ocurrirá en la mayoría de los ayuntamientos granadinos, salvo algunas excepciones donde claramente hay mayorías que facilitan el gobierno en solitario, el diálogo tendrá que imperar para formar un equipo que permita llevar adelante las iniciativas que proponga la administración provincial los próximos cuatro años.

Pérez como actual presidente de la Diputación hasta el término del mandato, una vez se celebre la investidura, otorgó especial importancia al proceso de escucha que se abre ahora ya que el escenario está "totalmente abierto". El líder del PP de Granada aseguró que "no doy nada por cerrado", para indicar que su partido ha conseguido 38 alcaldías directas y 16 mayorías simples, ganando en municipios "muy importantes", como Motril, Albolote, Loja, Almuñécar, Alhama o Lanjarón.

Por su parte, la secretaria general del PSOE de Granada, Teresa Jiménez, apuntó anoche que los resultados en la provincia revelan que hay una tendencia "de una clara mayoría de izquierdas" que será la que tendría que gobernar en la Diputación, para lo que se mostró abierta a conversar con el resto de fuerzas políticas que han obtenido representación. Tras un primer análisis de los resultados, Jiménez mostró su "satisfacción" por que los socialistas hayan obtenido un respaldo mayoritario.

Aunque los resultados en la capital han sido de todo menos satisfactorios, anoche en la sede de IU también había espacio para la alegría electoral. El coordinador provincial de IU, Manuel Morales, se plantó ante los medios con un mensaje claro: tras los resultados provinciales, que dan a IU mayor poder institucional y mayor incidencia política que el de las anteriores municipales, la realidad es que el "bipartidismo se está rompiendo" y que en ese cambio tiene mucho que ver la formación de izquierdas.

"El PP y el presidente del PP han perdido el control de la Diputación de Granada, mientras que IU ha recuperado su lugar", aseguró Morales, que reconoció que a la formación le gustaría ser la primera fuerza política, pero que recuperar su posición, ganando concejalías (de 105 pasan a 171) y alcaldías (de 5 se avanza hasta 11), es un paso importante.

Morales atribuyó este éxito a la "decisión valiente" de la izquierda de hacer un llamamiento ciudadano y formar "una coalición", que no ha sido mayor "porque otros no han querido", pero que sí ha sido suficiente para cambiar la situación en la Diputación.