El motociclismo española afrontará a partir de mañana, con el inicio del campeonato del Mundo con el Gran Premio de Qatar en el circuito de Losail, el complicado reto de enlazar un tercer triplete consecutivo y el cuarto de su historia.

El deporte del motor nacional no deja de mostrar su fortaleza año tras año y en el caso del Mundial de motociclismo su trabajo con las copas de promoción como el CEV Repsol (Campeonato de España de Velocidad) ha dado sus frutos estos últimos años en los que ha dominado el campeonato del mundo en sus tres categorías, con tres tripletes en cuatro años.

El primero se produjo en 2010 cuando Jorge Lorenzo, Toni Elías y Marc Márquez se imponían en las categorías de MotoGP, Moto2 y 125cc, respectivamente, algo que no se pudo repetir en 2011, cuando el australiano Casey Stoner y el alemán Stefan Bradl se llevaron las coronas en la categoría reina y la intermedia, con el alicantino Nico Terol haciéndose con la de 125cc.

Sin embargo, tras ese paréntesis el mando férreo de los pilotos españoles retornó y en 2013 hubo un nuevo triplete liderado por Marc Márquez en MotoGP, y continuado por Pol Espargaró (Moto2) y Maverick Viñales (Moto3). A este dominio se añade que Lorenzo y Dani Pedrosa fueron segundo y tercero en MotoGP, Esteve Rabat tercero en Moto2 y Álex Rins y Luis Salom, segundo y tercero en Moto3, por lo que el único piloto que no era español de los nueves que coparon los podios al final del campeonato fue el británico Scott Redding, subcampeón en Moto2.

El año pasado no hubo cambio, pese a que el dominio fue menos abrumador. Márquez repitió en la máxima categoría , con Valentino Rossi segundo y Lorenzo tercero; Eteve Rabat se estrenó en Moto2, por delante de Mika Kallio y Maverick Viñales; y Álex Márquez hizo lo propio en Moto3, por delante del australiano Jack Miller y de Álex Rins.