Tebeos. Las revistas infantiles. VV.AA. (Manuel Barrero, coord). Asociación Cultural Tebeosfera. DeAgostini. 408 páginas. 25 euros.

No contentos con alimentar su página web y dar a luz el volumen Gran catálogo de la historieta (2013), la mayor obra de referencia sobre cómic publicada en nuestro país, los valientes de la Asociación Cultural Tebeosfera se acaban de inventar una colección de monografías titulada (muy apropiadamente) Memoria de la historieta.

Como reza la carta del presidente de la ACyT Manuel Barrero: "Es nuestra intención, al iniciar esta colección de libros, ofreceros productos bien diseñados y de elegante presentación, pero siempre nutridos con excelentes textos". Ojo a ese "pero", que no está ahí por casualidad. Pues cierto es que existen cantidad de bonitos libros sobre cómic en el mercado, pero son muy pocos los que pueden presumir de ofrecer un contenido de obligada lectura. Es por eso que saludo con gozo la aparición de esta necesaria colección de estudios, hecha desde el amor profundo al medio, con un rigor y una seriedad de análisis poco comunes.

El primer título de la colección es Tebeos. Las revistas infantiles, un completo repaso al corazón de los cómics en nuestro país, que se detiene a analizar cabeceras míticas como TBO, Pocholo, Búfalo, Cavall Fort, Gaceta Junior y Gran Pulgarcito. Y es que, mientras los muy pensantes se las pasan loando el carácter adulto de la novela gráfica, todos los que leemos cómics sabemos que lo digno de reivindicación es su naturaleza infantil, sin la que el medio jamás habría alcanzado su popularidad y su idiosincrasia. Como recuerda Javier Alcázar en la presentación: "Aunque parezca mentira, hubo un tiempo en que los niños españoles leían tebeos". Tebeos. Las revistas infantiles es una completa crónica de dichos tiempos, una herramienta imprescindible para conocer nuestro pasado (no tan lejano), que es el primer paso para comprender el presente. Manuel Barrero, Jordi Canyissà, Jaume Capdevilla, José María Conget, Antoni Guiral, Jordi Manzanares, Eduardo Martínez-Pinna y Alfons Moliné componen la fenomenal nómina de un volumen que no debe faltar en ninguna biblioteca (y no digamos ya tebeoteca).