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Los documentos de Princeton arrojan luz sobre el Ayala filósofo

  • Unas jornadas en el Alcázar del Genil con especialistas en la obra ayaliana sirven para difundir el descubrimiento El material permite profundizar en la coherencia de toda su producción

El palacete Alcázar Genil, sede de la Fundación Francisco Ayala, reunió ayer a un reducido grupo de investigadores entre los que se encuentran los nombres de algunos de los más importantes especialistas en la obra ayaliana para poner en común y analizar los documentos que forman la ya famosa caja Selected Papers of Francisco Ayala, custodiada en la biblioteca Firestone de la Universidad de Princeton.

Se trata de una serie de documentos y textos de Ayala, guardados durante décadas en la citada biblioteca, que tras tener conocimiento de ellos la fundación ahora han sido digitalizados y arrojan luz sobre su forma de trabajar y sobre las múltiples facetas de su obra.

Estos papeles, como explicó Manuel Gómez Ros, documentalista de la Fundación que viajó personalmente a Princeton para acceder al material, quedaron depositados en esta Universidad tras la segunda estancia del escritor allí como profesor invitado en el curso 1957-1958.

Se trata de cinco carpetas, tres de las cuales contienen sendas copias del original de la novela Muertes de perro, que se publicaría en Buenos Aires en 1958. Las otras dos carpetas contienen documentos diversos, notas y apuntes en diferentes estados de elaboración.

Tras la Guerra Civil española, Ayala comenzó un largo exilio que lo llevó a Buenos Aires, Puerto Rico, Brasil y Estados Unidos, país este último donde dio clases y prosiguió su labor de escritor hasta que regresó definitivamente a España en 1976.

"No son inéditos destacados. Son apuntes y documentos que, probablemente, Ayala hubiera destruido", comenta la viuda del narrador, la hispanista Carolyn Richmond, que no tenía noticia de estos textos: "Mi marido los olvidó en su despacho y alguien llamó al bibliotecario o al archivo, será la persona que ocupó el despacho después. Él no se acordaba de los documentos. Los de la Fundación son muy listos y los han encontrado ellos".

Será la viuda del narrador, ensayista, sociólogo y articulista, que falleció en 2009 a los 103 años, la que decida la publicación o no cualquiera de los textos encontrados, aunque Manuel Gómez comenta que se trata de documentos de trabajo. En cualquier caso, el secretario de la Fundación Ayala, Rafael Juárez explica que es un material "muy valioso para conocer la forma de trabajar de Ayala", de ahí que se hayan organizado estas jornadas dedicadas a la caja localizada en Princeton.

En las carpetas de Princeton hay tres juegos de textos, entre los que sobresale el de Rasgos y tendencias de la economía actual. Son 45 folios a máquina en los que figura el nombre del autor pero no tienen fecha. Los escribió por encargo de la editorial Columba pero, por motivos que se ignoran, no llegaron a publicarse.

Esa reflexión sobre la economía plasma, según decía ayer el profesor Sebastián Martín, de la Universidad de Sevilla, "la conversión al credo liberal" de Ayala. La aportación del narrador a la historia de la economía no sólo la realizó desde posiciones marcadamente liberalistas sino que llegó "incluso a tocar postulados socialistas, desde los cuales reclamaba el intervencionismo del Estado en la economía y reivindicaba una democracia integral".

En otra de las carpetas hay 29 documentos diferentes, la mitad de ellos manuscritos, que van desde cartas y notas sueltas hasta "un texto acabado, firmado y fechado en noviembre de 1949" que, por alguna razón, Ayala no publicó y que es de carácter filosófico. Se trata, según contó Javier San Martín, catedrático de Filosofía de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), de unos textos en los que Ayala propone una filosofía orientada en la dirección de la fenomenología de Husserl, "muy comprometida y que va directamente contra la filosofía positivista del momento", que ofrecía una disciplina en la que "el ser humano tenía que desaparecer".

San Martín se ocupó tanto del único texto fechado y firmado de la caja de Princeton, el titulado Algunas consideraciones sobre el dato primario de todo conocimiento, para una fundamentación unitaria de las ciencias, como de otros textos menos acabados de la misma carpeta. "Ayala defiende lo contrario de la tendencia de la época: la filosofía y la ciencia tienen que fundarse desde el ser humano, desde el concepto de conciencia", indicó San Martín, que también se refirió a los otros textos hallados en Princeton, una "propuesta de antropología filosófica", que no llegó a desarrollar.

"Los tres documentos dan una perspectiva de la posición filosófica de Ayala muy importante. Como él tampoco había publicado cosas de filosofía tan rigurosas, nos darán motivo para buscar ese trasfondo filosófico en otras obras. Nos da una pista para releer la obra de Ayala desde esa perspectiva. Ayala es un pensador muy polifacético pero encardina el rasgo de escritor en una filosofía y una sociología. Hay una gran coherencia y estos escritos nos ayudan a cerrar el círculo", cuenta el catedrático.

Por su parte, el académico y catedrático de Literatura Comparada Darío Villanueva esbozó una nueva lectura de Muertes de perro a la luz de algunos documentos complementarios que se encuentran en las carpetas de Princeton, como una hoja manuscrita en la que Ayala traza un esquema de la novela, hoja que se ha reproducido en la nueva edición que la Real Academia Española y la editorial Alfaguara han publicado en la colección III Centenario de la RAE. Durante su ponencia, además, Villanueva destacó la importancia de la ironía en la escritura de Ayala y señaló ilustres referencias que se encuentran tras esta obra, como las de Cervantes o el Macbeth de Shakespeare. La nueva edición se presentó por la tarde en un acto en la Biblioteca de Andalucía.

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