Actual

Lapido: "Somos una banda de rock con dos cantantes"

  • El cantante granadino y Quique González llegan esta noche el Auditorio Manuel de Falla en uno de los últimos conciertos de su gira conjunta '¡Soltad a los perros!'

Quique González tenía poco más de 5 años cuando a José Ignacio Lapido le dio por empezar a tocar en algunos grupos de la época. Eran finales de los 70. Pertenecen a generaciones diferentes pero los universos dibujados en sus canciones comparten ciertos principios musicales en torno al folk, el blues, el rock'n'roll y el country. Su inclinación hacia los sonidos americanos se completa con una visión parecida de la integridad artística y la ética profesional. La gira que ahora les tiene de paseo por las carreteras españolas nace fruto de la admiración mutua y la amistad. Y de algo más, como señala Lapido: "Los amigos se reúnen en el bar todos los días a hablar de fútbol, pero no montan historias como ésta. No es tan fácil como decir que vamos a tocar juntos y ya está". Hoy les toca llevar a la práctica su fórmula en el Auditorio Manuel de Falla de Granada, donde actuarán a partir de las 21:00 horas.

Este encuentro de camaradas es la consecuencia de un proceso de atracción cuajado a lo largo de los años. Quique González versionó Algo me aleja de ti en su disco Daiquiri Blues, Lapido le invitó a cantar en En medio de ningún lado -canción que aparece en De sombras y sueños- y se han subido juntos en varias ocasiones a los escenarios para alguna colaboración puntual. Ahora hay un plan a seguir y más canciones compartidas: "Hemos pensado mucho las cosas para que todo vaya razonablemente bien: el repertorio, los músicos, la puesta en escena...".

¡Soltad a los perros! es el nombre de la criatura, agresiva y fugaz. "Se le ocurrió a Quique", comenta José Ignacio Lapido cuando se le pregunta por qué han llamado así a esta gira que ambos músicos comparten desde octubre. Lapido habla de los dos significados que se ocultan detrás del apodo: "Hace referencia a esa necesidad que se tiene en un momento de la interpretación a soltar todo lo que uno lleva dentro. Y también hace referencia al grito que soltaban los perseguidores de fugitivos cuando estos se fugaban. Tanto Quique como yo hemos comentado que será algo que no olvidaremos".

Con la gira tocando a su fin, Lapido hace balance, poniendo en valor esta experiencia: "Era un reto artístico para nosotros del que creo que hemos salido airosos y satisfechos de haberlo encarado".

Algunos rostros conocidos completan la banda que les acompaña. El granadino da el aviso: "El público va a ver a una banda de rock en toda la extensión de la palabra. Una banda con dos cantantes, cuatro guitarras sonando, órgano Hammond, piano, bajo y batería. Con momentos muy eléctricos y momentos de más contención". Por parte de Lapido están Víctor Sánchez a la guitarra y Raúl Bernal a las teclas. Tanto uno como otro forman parte del sobresaliente grupo de músicos que escoltan a Lapido en solitario. Los de Quique González son Edu Olmedo y Pepo López, batería y guitarra respectivamente, que también están metidos en el grupo que se consuma con Ricky Falkner, miembro de Egon Soda y Standstill además de ser un productor de éxito en la escena alternativa. Lori Meyers, Sidonie, Love of Lesbian, Iván Ferreiro… El elenco de grupos con los que ha trabajado no necesita presentación.

Este proyecto nace sin pretensiones más allá de los conciertos. No han planeado nada sobre grabar y publicar alguno de los directos de la gira. "Nos hemos centrado en disfrutar de cada concierto, que no es poco", apunta Lapido. ¿Y después qué? "Pues supongo que cada uno seguirá su camino... Hasta que los caminos de ambos vuelvan a cruzarse".

Según afirma el propio Lapido, aún no han probado a componer de forma conjunta: "La gira ha sido muy corta, apenas un mes. Si hubiesen sido varios meses de carretera compartida seguramente algo de eso hubiera sucedido".

Su carrera en solitario sí parece estar más algo más encaminada. Ha pasado año y medio desde la publicación de Formas de matar el tiempo, su séptimo trabajo, y Lapido ya mira de cara al próximo. Tiene las canciones "medio hechas", sólo le faltan las ganas de grabarlas: "Hoy en día grabar un disco es un acto de fe, una declaración de amor al arte y yo necesito todavía mentalizarme un poco más".

Lo de Lapido va más allá de la música. Además de ser un letrista de excelencia, su pluma se extiende por otros terrenos de la literatura. Conserva una columna de opinión quincenal en el diario Granada Hoy y ha trabajado como guionista de la serie andaluza Arrayán. Aunque estaría dispuesto a repetir en televisión, ahora está centrado en la música. "Soy escritor profesional que toca varios palos, pero estoy pensando seriamente en especializarme y dedicarme a escribir epitafios, creo que es donde mi estilo brilla más", confiesa José Ignacio Lapido, que tampoco se cierra puertas cuando habla de publicar un libro. Hace años coqueteó con la idea de editar un poemario que nunca llegó a ver la luz: "Seguramente llegará el día en el que mi nombre esté en la tapa de un libro". Pero advierte: "Recemos para que cuando llegue no hayamos perdido la vista".

A pesar de su apuesta por canciones desencantadas con la existencia, José Ignacio Lapido se aferra con fuerza al presente. No es fácil entrevistarle sin preguntar por un hipotético regreso de 091. Lapido contesta con un ladrido certero: "Haces bien en preguntar".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios