Carlos López y Antonio Vargas son dos artistas procedentes del mundo del circo y de la danza respectivamente, que decidieron unir sus experiencias para crear algo nuevo y diferente. Fue así como nació el proyecto Zen del Sur, en el que se mezcla la música en directo con la danza acrobática y varios elementos circenses. Aunque ninguno de sus componentes es granadino, la compañía tiene sede en la ciudad de la Alhambra. "Aquí es donde vivimos y creamos", afirma Carlos López, director de Zen del Sur.

El primer espectáculo nacido de este proyecto fue Heian, un término japonés que podría traducirse como 'paz' o 'tranquilidad'. Con esta representación, muy cercana al circo, la compañía logró varios premios y reconocimientos en toda España, como el Premio Talent de Madrid o el Premio del público en el Festival de Danza e integración 10 sentidos en Valencia, ambos en 2013. Ahora, Zen del Sur ha decidido reinventar este espectáculo, dando lugar a Heian Concert, una versión musical, en formato de trío, de su anterior proyecto, en el que se invita a los espectadores a caminar por un sendero de emociones.

En esta nueva exhibición, las acrobacias circenses ceden su sitio a la música, mezclando instrumentos clásicos, como el piano y el violonchelo, con otros más étnicos, como el hang o la kalimba africanas, dejando también espacio para los sonidos sintetizados. El resultado es un paisaje musical de lo más peculiar.

Se trata, por tanto, de un concierto, pero no al estilo tradicional, ya que Zen del Sur propone una mezcla de ritmos, desde el jazz hasta las melodías clásicas, con la que intentan despertar nuevas sensaciones en el público durante los 75 minutos que dura la función.

Heian Concert bebe directamente de su predecesor. Los temas son los mismos, pero en esta ocasión están más tratados técnicamente y con una composición más cuidada. De esta forma, cada pieza dura alrededor de diez minutos, frente a los dos de Heian. También, en esta ocasión, desaparece la interacción con el público, que se limita a algunos pequeños momentos durante el espectáculo y algunas "sorpresas", como las califica López, pero nada más. Aquí la música es la única protagonista.

Tres personas componen esta nueva versión de Heian: Carlos López (piano y percusión), María Prado (violonchelo) y Rubén Llorach (piano). Se trata, sin duda, de un número más reducido respecto al original, aunque desde la organización aseguran que no importa, ya que son capaces de llenar el escenario como si "hubiera veinte personas".

La ciudad de Granada ya ha sido testigo en varias ocasiones de este concierto tan particular. Zen del Sur ha llevado su espectáculo a varios locales granadinos como El Apeadero, en noviembre de 2014, o La Expositiva, en marzo de este año, a los que hay que sumar el Corral del Carbón. Dentro del programa Veranos del Corral, la compañía presentará Heian Concert por partida doble, esta noche y mañana, ambas a las 21:30.

Frente a lo que dice el refrán, a la tercera no va la vencida, puesto que el público granadino ha disfrutado de cada una de las sesiones anteriores de Heian Concert. Pese a ser un concierto poco habitual, los asistentes "terminan muy contentos", asegura López, quien afronta con buenas expectativas, al igual que el resto de Zen del Sur, las dos representaciones del Corral del Carbón. "Allí estaremos con ilusión", sentencia el director.