Uno de los conciertos más esperados de la temporada por los aficionados a la música romántica es el que tendrá lugar este viernes en el Palacio de Congresos de Granada a cargo de Tamara y de Rafael Basurto, miembro del legendario Trío Los Panchos. La sola mención de estos dos nombres ya nos da suficientes pistas sobre el verdadero protagonista de la noche, que no será otro que el bolero, que tan grande se hizo tanto en España como en la América de habla hispana en las voces de Los Panchos.

'Encadenados al Bolero' es el nombre de un espectáculo en el que Rafael Basurto y la cantante sevillana Tamara, la nieta del cantaor Rafael Farina, por si hay algún despistado que quiera confundirla con la bilbaína Yurena, anteriormente llamada igualmente Tamara, darán un repaso a los grandes éxitos del bolero, aunque también tendrán tiempo para presentar algunas composiciones nuevas de los autores románticos de la actualidad. Ambos cantantes estarán acompañados por un trío de guitarra, piano y percusión para ensalzar la expresividad de estas dos grandes voces. Desde que debutara con apenas quince años a finales de los noventa, la portentosa voz de Tamara se ha hecho con una nutrida legión de admiradores a uno y otro lado del Atlántico por la madurez y personalidad que imprime a sus interpretaciones.

Distinta es la historia de Basurto y del trío con el que alcanzó el estrellato, Los Panchos, que en realidad formaron dos mexicanos y un puertorriqueño en Nueva York a mediados de los cuarenta y que en su origen se dedicaban a las rancheras, antes de especializarse en el bolero y convertirse, ya a partir de los cincuenta, en uno de los tríos más célebres de la música hispanoamericana.

Por su parte Basurto ingresó en Los Panchos en 1977 y permaneció como primera voz hasta los noventa, cuando aún militaba en el trío Chucho Navarro, uno de los fundadores.

Es en 1992 cuando repentinamente abandona el grupo para establecerse en España usando el nombre de Los Panchos a pesar del contencioso que mantiene con Chucho Navarro Jr. y Gabi Vargas, otro miembro histórico, que sostienen que Basurto usurpó el nombre de Los Panchos, como avaló en 2005 un tribunal de Los Ángeles.