La Biblioteca de Andalucía acoge la exposición Manuel de Falla en París que, organizada por la Alianza Francesa de Granada y la Fundación Archivo Manuel de Falla, propone una aproximación a la importancia de la capital parisina y de lo francés en la vida y la obra del compositor gaditano.

La muestra abre el ciclo de actividades culturales que ambas instituciones han programado dentro de los XXII Encuentros Manuel de Falla, dedicados en esta edición a las Noches en los jardines de España.

Según Elena García de Paredes, gerente de la Fundación Archivo Municipal de Falla, la exposición con carácter itinerante "propone una aproximación a la importancia de París y, por extensión, de lo francés en la vida y la obra de Falla".

Durante su estancia parisina (1907-1914), Falla perfeccionó su arte, alcanzó el reconocimiento internacional como compositor y trabajó en algunas de las obras fundamentales de su catálogo, como las Cuatro piezas españolas, Trois mélodies, Siete canciones populares españolas o Noches en los jardines de España.

El desencadenamiento de la Primera Guerra Mundial le obligó a regresar a España, pero mantuvo siempre un contacto estrecho con París y, en 1923, en una carta dirigida al pintor Ignacio Zuloaga, Falla resumió con una fórmula definitiva lo que la capital francesa representaba en su trayectoria de músico: "Para cuanto se refiere a mi oficio, mi patria es París".

El programa cultural de la Alianza Francesa de Granada y el Archivo Manuel de Falla continuará con el ciclo Cine, música y poesía.

Las familias también serán protagonistas del programa diseñado por la Alianza Francesa de Granada y la Fundación Archivo Manuel de Falla y el 19 de noviembre tendrán lugar dos talleres para todos los públicos titulados Noches en los jardines de España y dirigidos por Ana López.

Como colofón, el 24 de noviembre tendrá lugar el recital Encuentros en la noche, una evocación de Noches en los jardines de España de Manuel de Falla.

El compositor Manuel de Falla, tras su marcha de Granada con la Guerra Civil se exilió a Altagracia, en Argentina.