Una plácida tarde de domingo del pasado mes de junio, la noticia de que un furibundo incendio estaba arrasando la sala más emblemática de la ciudad sobresaltó al mundillo musical granadino. El rumor y la posterior confirmación se propagó entre músicos, técnicos, promotores y aficionados de manera más vertiginosa que el propio incendio.

A la conmoción le siguió el temor de que el fuego significara el final de una historia legendaria sin cuyo concurso no se podría explicar la historia de la música en directo de la ciudad de Granada. Afortunadamente, algo más de cuatro meses más tarde, y gracias a la incansable labor de los actuales propietarios, músicos y técnicos conocidos de la escena granadina, la sala anuncia su celebrada vuelta a la normalidad con un doble cartel y un horario inusual. Mañana sábado, si todos los plazos se cumplen, y los implicados están dando lo mejor de sí mismos para que así sea, desde la una del mediodía la sala abrirá de nuevo sus puertas para recibir, con la consabida oferta de canapés que mitiguen el hambre que a esas horas suele apretar, a los invitados que asistirán a la actuación del grupo Los Bomberos, una banda formada por miembros del cuerpo, alguno de los cuales participó en la extinción del incendio de junio, dirigiendo a sus compañeros precisamente por su conocimiento de los recovecos de la sala.

Eso será solo el aperitivo, pues para más tarde, ya a la hora habitual en que se suelen programar las actuaciones, llegará el turno de un estreno que coincide con el la remodelación. Nos referimos a la muestra Granada Calling, un ciclo que forma parte de la iniciativa promovida por el Ayuntamiento para revalorizar la marca del rock granadino, Granada, Ciudad de Rock (GRX-R&R), cuyo objetivo es el de promover y visualizar a los grupos noveles y ofrecerles la posibilidad de actuar en condiciones profesionales.

La primera entrega de este ciclo tendrá lugar en Planta Baja a partir de las nueve de la noche con los grupos Apartamentos Acapulco, Briótica y Verona. Será el primer capítulo de una serie que continuará en noviembre y diciembre en las salas La Expositiva y La Sala respectivamente, con nombres como los de Cristina Ybarra, Piano Súbito y El Irlandés Errante, en la primera, y Eskóbula, Svuco y Sölar, en la segunda.

La próxima vez que nos tengamos que referir a la actuación de una banda para calificarla de incendiaria, que sea simplemente una recurrente metáfora.