Tan sólo doce horas después del violento asalto sufrido por la familia que habita en el número 35 de la calle Tarragona de Armilla se practicaron las primeras detenciones. Primero fueron detenidos dos individuos, uno de los cuales es un pariente cercano de la pareja.

Según fuentes de la Benemérita, ambos sospechosos habían sido citados por la mañana en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada, en la capital, para que prestaran declaración como testigos, pero acabaron siendo arrestados tanto por las "contradicciones" en las que incurrieron como "por otros indicios".

Poco después, sobre las 13:20 horas, una tercera persona, que también había sido citada a declarar como testigo en el acuartelamiento de Almanjáyar, era detenida, sin que haya trascendido su grado de implicación en los hechos, así como tampoco el de los otros dos arrestados.

Fuentes del Instituto Armado consultadas por este diario indicaron que los investigadores ya tienen en su poder el arma blanca -un cuchillo- con el que los asaltantes hirieron mortalmente al padre de la familia y casi acaban con la vida de los pequeños, que también fueron heridos en el cuello.

Tras su detención, los tres sospechosos prestaron declaración, ya en calidad de detenidos, en las dependencias de la Benemérita, donde se requirió el apoyo de un intérprete de lenguaje de signos para uno de ellos.

Aunque la Guardia Civil mantiene abiertas varias líneas de investigación sobre el móvil del crimen, el subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez, apuntó al ajuste de cuentas como el más probable. No obstante, se desconoce si el violento asalto está relacionado con asuntos de droga o con otro tipo de deuda o rencilla. Las fuentes confirmaron que el finado, Iván L.R., de 31 años, tenía antecedentes.

Ayer por la mañana, en la acera de la calle Tarragona de Armilla aún había pisadas de sangre, las huellas de una violenta acción que ha sobrecogido a todo el vecindario, pues los autores apuñalaron a la mujer y a los pequeños y ejecutaron al hombre sin piedad, después de propinarle una tremenda paliza.

Los servicios sanitarios fueron alertados por los vecinos, desplazándose al lugar dos ambulancias y varios coches policiales de la Guardia Civil y de la Policía Local de Armilla.

El caso se encuentra bajo secreto de sumario por orden judicial, según Europa Press, que desveló que uno de los detenidos es una mujer, sin que hayan trascendido más datos sobre sus identidades, aunque podrían ser vecinos de la zona Norte.

Según esta agencia, antes del crimen hubo una pelea. Los investigadores no hallaron indicios de se produjera robo alguno en la vivienda.