Antonio Pagudo. Javier Maroto en 'La que se avecina'

"Lo mejor para un cómico es tener un papel que reciba hostias"

  • En la nueva temporada de los vecinos de Mirador de Montepinar el personaje del actor andaluz mantiene un romance con la psicóloga Judith.

Telecinco sigue fuerte en el prime time de los lunes con la octava temporada de La que se avecina, la comedia más consolidada y seguida de la parrilla española. Los vecinos de Mirador de Montepinar tomaron el relevo del Chiringuito de Pepe a mediados de octubre con nuevas trastada y alguna que otra sorpresa en forma de incorporaciones. El granadino Antonio Pagudo (Baza, 1977), Javier Maroto en la ficción, cuenta para este periódico sus proyectos y ese romance que en la nueva tanda tiene con el personaje de Judith (Cristina Castaño).

-Esta temporada tuvo un preestreno ante el público en Madrid ¿es una sensación distinta escuchar las risas en vivo?

-Hubo bastante gente en el preestreno y lo mejor, claro, fue compartir con el público las sensaciones y sentimientos respecto a la serie. La gente se ha acostumbrado a ver las historias de estos locos y nos paran por la calle para felicitarnos y hacerse fotos. Es una pasada. Algunos me decían que gracias a nosotros, cuando llegaban a casa agotados del día y ponían la serie, les sacábamos una sonrisa. Que te digan eso es una maravilla, de verdad.

-Parece que la vida de Javi nunca será tranquila. ¿Seguirá así durante la octava temporada?

-Lo mejor que le puede pasar a un cómico es tener un papel que reciba hostias por todos lados, ya que la gracia de una comedia está en reírnos de lo que le sucede a otra persona. Maroto tiene muchos conflictos: una hija de la que se ha encargado solo y, para colmo, la búsqueda de su amor, con la que quiere tener una vida muy tranquila.

-¿Qué tiene su personaje de usted?

-Llevamos tanto tiempo juntos que ya no sé quién es quién. Es una bendición tener un personaje con el que compartes muchas cosas. Javi es un enamorado del amor porque siempre se ha lanzado y es un tío que, aunque esté rodeado de vecinos dementes y se deje llevar por esa locura, es una persona formal y a la que yo le confiaría todos mis enseres.

-¿Alguna vez le han parado por la calle y le han gritado: ¡Maroto!?

-Ahora hay más difusión y feedback con la prensa, por lo que vosotros nos echáis un cable a la hora de establecer ese distancia que hay entre el actor y el personaje. Pero si gritan el nombre de tu personaje por la calle, algo has hecho bien profesionalmente.

-¿Cómo ha ido el rodaje con los nuevos personajes de La que se avecina?

-Genial. Ha sido todo un placer trabajar con ellos. Además, solemos anticiparnos porque cuando te llega el capítulo y hay un personaje nuevo que nunca ha aparecido te preguntas quién va a ser.

-Sus escenas donde se dan más momentos cáusticos son en el bar. ¿les envuelve un entorno tan familiar?

-Cómo no, como la vida misma. El bar es un sitio mágico donde nos lo pasamos mucho mejor. Nos cuesta mucho porque tenemos que grabar una serie y no siempre hay ganas de cachondeo, pero hay momentos buenos y malos. Es complicado subirse a ese carro de emociones, pero el equipo y todos los actores lo pasamos bien en todos los ambientes del plató, porque es un espacio pequeño en el que tenemos un contacto más directo.

-¿Se agudiza el ingenio?

-Cada vez que aparece Amador ideamos una nueva forma de "reventarle la cabeza", jajaja.

-Le hemos visto participar en El club de la comedia con algunos monólogos ¿Tiene otros proyectos a la vista?

-Por ahora estoy trabajando en el humor porque me encanta. Ser cómico es una tarea difícil y ya llegarán otras propuestas de expresión dramática. Trabajo codo con codo con Alejo Sauras o Jorge Calvo en la obra de teatro El eunuco, un espectáculo que se estrenó en Mérida y con el que vamos recorriendo España. A partir de enero, haremos una nueva temporada. No sólo actuamos, sino que hacemos otras cosas. Es un placer siempre hacer teatro.

-¿Qué le diría a aquellos que tienen una opinión en contra de La que se avecina?

-La gente que le gusta La que se avecina siempre va a estar ahí, pero la gente que no la ha visto o que de pronto no sabe qué hacer, les pido por favor que la vean, porque no podrán participar en las conversaciones de los desayunos del día siguiente. Está demostrado, el martes por la mañana nuestra serie el tema del que todos hablan.

-¿Echa de menos a su 'madre'?

-Por supuesto. Con Beatriz Carvajal te divertes y aprendes.

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