Laura Sánchez. Dobla a Anna en 'Vivo con modelos'

"El doblaje es el trabajo más difícil que he hecho nunca"

  • La 'top' y actriz andaluza dobla a una modelo en la serie de Comedy Central sobre este mundo y sus tópicos.

La satírica modelo a la que dobla en Vivo con modelos, la serie que emite el canal Comedy Central desde este mes de junio, no es el primer personaje que sale de la garganta de Laura Sánchez, quien ya puso voz a una pequeña hada en la película de animación Campanilla (2008), que contaba la historia de la amiga de Peter Pan. En esta nueva aventura tras los micrófonos, la top y actriz onubense se pone en la piel de una modelo de catálogos que convive con dos compañeros de profesión, hasta que llega al piso un camarero torpe y regordete reconvertido a modelo de manos, que trae, además de un surtido de comida basura, un soplo de aire fresco al homogéneo grupo.

-Segunda experiencia en el mundo del doblaje. ¿Habrá más en el futuro?

-Ni idea. Lo que sí sé es que es mucho más complicado doblar a una persona que a un hada (risas). En animación puedes jugar más con tu voz, es más divertido. Pero con un personaje real es complicadísimo. No sé qué haré en el futuro, pero sí sé que respeto muchísimo a los dobladores profesionales, y yo no lo soy. Gracias a un trabajo muy duro con el director de doblaje he podido hacer este papel, pero pensé muchas veces: "¡Dios mío, en qué me he metido!" Es el trabajo más difícil que he hecho nunca.

-Además, ha tenido que neutralizar su acento andaluz.

-Bueno, di clases de dicción hace años, cuando empecé en el mundo de la interpretación, y sé disimularlo ya. Además, yo tampoco he tenido nunca un acento demasiado arraigado. Pero el problema del doblaje no ha sido ése sino más bien la actitud... yo ponía todas las caras y gestos de lo que iba diciendo para que se tradujera en la voz. Además, no tienes réplica porque cada personaje se dobla por separado y es dificilísimo interpretar, meterte en el papel.

-Usted pone la voz a Anna, una modelo que vive en un piso con dos más hasta que llega Tommy, un camarero con exceso de peso. No le habrá sido difícil meterse en el papel. ¿Convivió alguna vez con otras modelos en sus comienzos?

-Sí, estuve en pisos con modelos cuando empezaba. Cuando leí el guión por primera vez pensé que ojalá me tocara doblar a Anna... ¡y tuve suerte! Es un 'personajazo', una chica graciosa, con un sentido del humor muy suyo, muy satírico. La convivencia, no sólo de modelos, sino de personas diferentes que no se conocen, de culturas distintas además, siempre resulta curiosa, y genera situaciones de todo tipo. En mi caso, la realidad superó muchas veces la ficción (risas).

-¿Vivo con modelos es, entonces, una ficción muy real?

-Síii. Es una comedia llevada al extremo que explota los lugares comunes de este mundillo, en la que la rubia es muy rubia y el modelo masculino muy bobo. Vamos, los tópicos de siempre llevados al límite. Pero así ocurre a veces en el día a día también.

-Hace poco intervino en la película Tres bodas de más, pero en la tele hace tiempo que no la vemos. ¿Hay algún proyecto televisivo en el horizonte?

-Puede que vuelva a la tele en septiembre, pero no puedo adelantar nada porque no está aún cerrado. De momento, en verano me voy a centrar en mis 'cositas' de modelo y diseñadora (tiene una marca de ropa interior y de baño para mujer, Bloomers&bikini, con su novio, David Ascanio).

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