Aunque en la ficción haga de chico despistado que no se entera de nada, lo cierto es que Nacho Guerrero no tiene ni un pelo de tonto. Sus inicios como actor fueron en el teatro, pero la vida quiso que acabase en la pequeña pantalla, donde ya lleva nueve años ganándose el afecto de crítica y espectadores.

-Acaba de comenzar el rodaje de la novena temporada de 'La que se avecina'.

- Sí, hemos grabado ya algunos episodios, en la misma línea de siempre. No puedo contar mucho, pero estoy seguro de que va a sorprender esta temporada.

-¿En qué se diferencia Coque de Nacho Guerreros?

-Prácticamente en todo (dice entre risas). Por ejemplo yo cobro a fin de mes y el pobre Coque no ve ni una nómina. Además soy una persona muy ordenada, con algunas manías. Por ejemplo, mi casa no se puede pisar con zapatos de la calle. Cuando tengo invitados les ofrezco unas zapatillas.

-El personaje de Coque es muy característico. ¿Tiene miedo de encasillarse?

-Todos los personajes masculinos de la serie son peculiares, no solo Coque. Pero no. Le temo más al paro que a encasillarme en mi papel.

-A sus padres les tocó el Gordo en 2002 ¿Qué tal fueron esas navidades?

-Muy bonitas. El premio cayó íntegro en mi ciudad, Calahorra, así que la alegría era compartida por casi todos los vecinos. La pena es que ese día aún estaba en Madrid, trabajando, y me perdí toda la celebración. En esa época la comunicación no era tan directa como ahora, no teníamos Whatsapp. De hecho me enteré por un mensaje en el contestador de casa.

-¿Trabajó en muchas otras cosas antes de triunfar como actor?

-Sí. En esa época por ejemplo tenía que trabajar en un bar por las noches. Aún no ganaba lo suficiente como para dedicarme exclusivamente a la interpretación. La suerte es que siempre he tenido el apoyo de mi familia para seguir hacia delante.

-¿Cómo fue la conquista de la fama?

-La fama es algo que te encuentras sin esperártelo. Pura casualidad. Yo quería dedicarme al teatro clásico y ahora mira donde estoy. Lo importante es saber aprovechar cada oportunidad y aprender de las experiencias.

-¿Qué le aconsejarías a un nuevo actor?

-Ante todo paciencia. Esta es una profesión en la que siempre se está empezando, como si fuese un examen continuo. Hay que muy constante y estar pendiente del trabajo de los demás.

- Usted es activista por los derechos de los animales.

- Sí, en la tierra no sólo habita el ser humano. La única diferencia es que nosotros somos seres racionales, lo que implica que tenemos que responsabilizarnos del bien de los demás. No soy taurino, pero respeto a la gente que le gusta.

-Supongo que no le habrá gustado mucho el programa ¡Vaya Fauna!

- La verdad es que no lo he visto. Apenas veo la televisión, ni si quiera los informativos, me amargan. Las series y películas prefiero verlas en el ordenador. También intento ir mucho al teatro.

-Aparte del rodaje de la serie ¿Tiene otros proyectos?

-Sí, participo en una película, Deus ex machina, pero aún tardará unos meses en estrenarse. Para la primavera que viene también tengo un proyecto teatral, pero sobre eso sí que no puedo decir todavía ninguna palabra.